Por Boris Luis Cabrera
No pudieron impedirlo hechizos ni brujerías adversarias, tampoco fue efectivo los rezos desesperados de contrincantes nerviosos ni de fanáticos indolentes. Esta mañana de martes, los Leones de Industriales entraron corriendo sobre el campo de juego al maravilloso mundo de la post-temporada y cerraron tras de sí la pesada puerta, para terminar con los sueños quijotescos de los aguerridas avispas santiagueras.
Unos Elefantes honoríficos intentaron pararse en el camino. Sin motivación pero con garra defendieron su orgullo sureño, pero el destino ya estaba escrito con letras góticas y la tropa de Rey Vicente Anglada, apoyada en su estirpe y con la venia de los dioses azules, los tiró a la arcilla para vencerlos por la mínima seis anotaciones por cinco en las siete entradas estipuladas.
Cinco veces pisaron la goma del plato los felinos en la parte baja del sexto episodio para borrar una desventaja de cuatro anotaciones y encaramarse encima del marcador para sorpresa de los miles que se dieron cita en el coloso del Cerro a pesar de la hora y de las inclemencias del tiempo.
Cuatro ilustres veteranos (Cepeda, Stayler, Samón y Urguellés de emergente) sonaron cohetes consecutivos para estropearle la víspera de navidad al relevista Miguel Lahera que después de un pelotazo, una rolata impulsora de Osmel Cordero también en funciones de emergente y una línea del sustituto Wilfredo Arocha a los jardines que se convirtió en “elevado de sacrificio”; vio como se le escapaba el partido por debajo del guante del torpedero Luis Vicente Mateo al anotar los capitalinos la carrera que marcó la diferencia definitiva y puso a Industriales, al Latino, a media Cuba y el extranjero a celebrar.
Del resto se ocupó Andy Rodriguez, acumulando votos para ser elegido el jugador más valioso del torneo, al retirar por su orden a los tres contrarios que enfrentó, para asegurarle la victoria al relevista Frank Herrera y anotarse su salvamento número 17 de la temporada.
En el momento de escribir estas líneas, el triunfo de los Industriales y de los Cocodrilos matanceros ha formado un desorden tal en la tabla de posiciones que habrá que esperar hasta el último partido de esta fase clasificatoria para definir las posiciones finales.
Lo importante, es que el equipo de la capital ya está en la gran fiesta de la pelota cubana y ha regresado por sus fueros en busca de la corona, generando preocupaciones en sus contrarios y motivando a los aficionados de todo el país que andan desesperados por canalizar sus emociones en los graderíos.
Nos vemos en el estadio.