Por Guillermo Sánchez
New York Yankees quiere sacarse la espina de la barrida ante su rival de división Boston Red Sox y para ello recibió en su casa, el Yankee Stadium, a Seattle Mariners, un equipo que lucha por sobrevivir en la Oeste de la Liga Americana y que previo al juego de hoy reportaba average de .500 (35-35).
La visita mandó al terreno de juego a George Kirby, el derecho hasta le fecha reporta un 6-5 con una efectividad de 3.31 en 81.2 entradas de labor, los de casa colocaron en la lomita a su estrella, el estelar Gerrit Cole, el derecho se ha visto intratable y es de los candidatos al Cy Young 2023, su 7-1, 2.70 de porcentaje de carreras limpias y 98 «chocolates» lo avalan.
Pero vamos a la acción. En la parte baja del mismísimo primer episodio el venezolano Gleyber Torres llegó a primera base tras conectar línea de sencillo al jardinero central Julio Rodríguez, luego de ello el turno correspondió al primera base de Yankees, Anthony Rizzo, con dos outs en la pizarra.
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Tras conteo de 0-1, Kirby envió una recta a 97.7 MPH al mero centro del plato, Rizzo no lo dudó e hizo un poderoso swing mandando la pelota muy lejos, de hecho, en la apreciación inicial pareció que la bola se perdería entre los fanáticos con un batazo de jonrón, pero no fue así, «Doña Blanca» que había salido con una velocidad de 105.5 MPH voló por el cielo de Nueva York cerca de 375 pies por el jardín derecho.
Los jardineros dominicanos, Julio Rodríguez (central) y Teoscar Hernández (derecho) partieron en busca de la esférica, este último fue quien le llegó pero no pudo tomarla ya que la bola pegó de su guante y cayó al suelo permitiendo que Anthony Rizzo llegara a la segunda base (la anotación oficial de parte de MLB fue doble) y Torres anotara en carrera abriendo el marcador 1×0 favorable a Yankees sobre Marineros.
Yankees de Nueva York ha perdido los últimos cuatro juegos en fila y tiene récord de 3-7 en la muy complicada división Este de La Liga Americana, actualmente se encuentran a 10.5 encuentros de Tampa Bay Rays y a 5.5 de los sorpresivos Baltimore Orioles, por lo que cada victoria cuenta.