Los Medias Blancas de Chicago no la tuvieron muy difícil ante los Marineros de Seattle en la jornada de este lunes. Los patiblancos vencieron 10-4 a los navieros con gran aporte de sus dos estrellas cubanas: José Abreu y Yoan Moncada. Ambos estuvieron en plan estelar y cargaron con la ofensiva de los dirigidos por Rick Rentería.
“Pito” se fue de 5-4, con dos estacazos de vuelta completa para llegar a seis en la temporada, más tres carreras impulsadas e igual número de anotadas.
El inicialista, quien se ha convertido en uno de los bateadores más consistentes del béisbol, llegó a siete juegos seguidos con al menos un imparable. Durante esa racha, liga para .400, producto de 12 inatrapables en 30 viajes legales al plato, un doble, tres vuelacercas, seis producidas y seis vueltas al cuadro.
Gracias a esta actuación logró varias cosas: 1) llegó y superó los .300 de promedio con el madero, 2) su noveno desafío con cuatro o más hits en su trayectoria y 3) la duodécima ocasión que dispara dos jonrones o más. Esto último lo han conseguido solo otros nueve peloteros en la historia de los Medias Blancas. De hecho, ahora mismo está igualado con el memorable Jermaine Dye.
Abreu quedó ligando para .308 (78-24), con tres biangulares, seis jonrones, 12 fabricadas, 12 anotadas, tres bases por bolas y 13 ponches. Su OPS está en .949 en 19 compromisos en la presente ronda regular.
A Moncada, lamentablemente, le faltó el batazo más “fácil” de conectar en el béisbol: el sencillo. Solo eso necesitó para completar una gesta muy poco vista en la pelota, la escalera o el ciclo.El prospecto ligó tres incogibles en tres oportunidades oficiales. Pegó su quinto doblete, su primer triple de la campaña y su cuarto cuadrangular ante los Marineros. Se habría convertido en el primer cubano con el ciclo desde que lo hiciera Abreu, el año pasado.
Es la primera vez en la zafra que el infielder de los patiblancos da tres o más indiscutibles en un duelo y la cuarta vez en su joven carrera en la Gran Carpa.
Otro que la desaparece
Yonder Alonson también emuló a sus paisanos Abreu y Moncada, al sacar la pelota del parque y darles la victoria 2-1 a los Indios de Cleveland sobre los Orioles de Baltimore.
Fue el quinto del año y terminó la jornada con un hit en tres turnos legales.
El batazo del primera base llegó en la alta del segundo episodio contra el abridor derecho Kevin Gausman, justo cuando tenía un hombre en circulación. Fueron las dos únicas rayitas de la tribu, suficientes para respaldar la gran labor del diestro Carlos Carrasco.
El capitalino, de a poco, parece levantar su ritmo. En sus últimos nueve juegos, batea para .286, con un doblete, tres vuelacercas, ocho impulsadas y cinco vueltas al cuadro para la causa de la tribu.
Así le fue al resto de cubanos que vio acción en la jornada del lunes en las Grandes Ligas:
Yulieski Gurriel (HOU) dio un hit en tres chances oficiales, sin razón aparente.
A Raisel Iglesias (CIN) le fue bien, como de costumbre, en su trabajo como cerrador de los Rojos. Se acreditó su tercer salvamento en labor de 1.1 innings perfectos de un ponche.