Por eso NO habla de Cuba: Yoan Moncada promocionó su bar en Cienfuegos

Durante la celebración del V Clásico Mundial de Beisbol, en la fase de Miami, el cubano Yoan Moncada esquivó las preguntas de carácter político realizadas por la prensa acreditada en el evento. – ¿Tú también dices Patria y Vida?, preguntó el periodista de Radio Martí Ricardo Quintana al big leaguer cubano Yoan Moncada. La respuesta […]

La respuesta del antillano fue la siguiente: «Yo… no puedo responderte esa pregunta. Yo soy pelotero, yo no tengo nada que ver con eso», afirmó Moncada mientras entrenaban en el IoanDepot Park, estadio de Miami Marlins en la Florida.

Si bien la presencia en el equipo Cuba de jugadores como Andy Ibáñez, Luis Robert Jr. y el propio Moncada fueron polémicas, con criterios divididos en la afición y la prensa especializada, la actitud del cienfueguero aumentó la inconformidad de sus detractores por su vínculo con un equipo que representa la Federación, el gobierno cubano y toda su dictadura.

Dicha actitud del antillano se puede catalogar, cuando menos, de irresponsable. Desaprovechar la oportunidad de denunciar los problemas que existen en Cuba en una tribuna como la del Clásico fue una cobardía que le hizo perder muchos seguidores.

En aquel momento poco se entendía su actitud. No encajaba como un hombre con un salario millonario, «libre» y sin compromisos con los dirigentes cubanos, podía callar los atropellos que se cometen en su nación.

Este miércoles, varios meses después de concluido el torneo mundialista, Moncada anunció en su cuenta Oficial de Instagram la inauguración de su Bar «YM Dluxe Bar», la cual sucederá el próximo viernes 25 de agosto, con la actuación en vivo del cantante «Bebesito».

Según el perfil en Instagram del centro nocturno, el local abrirá sus puertas de jueves a domingo, en los horarios comprendidos entre las 10:00 p.m. y las 4:00 a.m. La descripción del sitio indica que es «lujoso, exclusivo y VIP (persona muy importante, por sus siglas en inglés).

El Bar se encuentra en Cienfuegos, su ciudad natal, la cual ha visitado en reiteradas ocasiones desde que debutó en el mejor beisbol del planeta.

Yoan Moncada decidió callar y pensó en sus negocios futuros

Ahora se entiende su silencio. La acción de mirar hacia el lado contrario. De esquivar y de preferir ser pelotero antes que cubano, patriota. En realidad Moncada escapó de la realidad dando su peor cara, pensó en su futuro, sus ingresos, su economía y hasta, quizás, el bienestar de su familia.

En ese momento olvidó lo más importante. Olvidó la repercusión que puede tener una figura pública. Un jugador que es ídolo de varios jóvenes. Moncada, quizás, garantizó el futuro prolongado de su familia, pero aportó un granito de arena para seguir enterrando el de miles de cubanos oprimidos.

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