Por Juan Páez / @jmanupz
Comenzó la segunda mitad de la temporada de Grandes Ligas y con ella empiezan las interrogantes de hasta dónde podrán llegar las figuras en cuanto a estadísticas, topes personales y récords. De eso no escapan las estrellas cubanas, quienes se enfrentan a retos en lo personal cuando falta menos de dos meses y medio para que finalice la ronda regular.
Pese a que Aroldis Chapman tuvo un inicio bastante flojo en cuanto al ritmo de salvados se refiere, pues solo rescató 12 juegos en los primeros dos meses de zafra, sus actuaciones en junio y julio le han permitido ponerse en buen camino para que cuando el último encuentro de la campaña finalice, tenga un nuevo tope personal en salvamentos.
El cerrador de los Yankees de Nueva York acumula 26 tapones, cuatro más que los que acumuló en su turbulento 2017. Las proyecciones indican que si el “Misil” mantiene el ritmo, terminará una temporada con 40 o más salvados por primera vez en su carrera, específicamente con 43.
Con esa marca, dejaría atrás los 38 que totalizó en 2012 y 2013 como el apagafuegos de los Rojos de Cincinnati.
“Pito”, contra todo pronóstico
José Abreu es uno de los pocos hombres en la historia de las Grandes Ligas que han comenzado su carrera con cuatro campañas de, como mínimo, 25 jonrones y 100 carreras remolcadas. Esa racha está altamente en peligro, pues el rendimiento del inicialista de los Medias Blancas de Chicago amenaza con dejarla, precisamente, en cuatro.
A estas alturas de la temporada, cuando los patiblancos ya suman 97 desafíos, “Pito” únicamente colecciona 13 estacazos de vuelta completa y 52 fletadas. Los números indican que si su ritmo sigue intacto, terminará la etapa eliminatoria con solo 22 bambinazos y con 87 impulsadas. No solo eso, sino que también su promedio al bate podría quedar, por primera vez, por debajo de .290.
También sería, según las proyecciones, la edición de Abreu con menos imparables (156) y, eso sí, con más dobletes (45).
¿A dónde va Gurriel?
Parece que la parte final de la campaña está hecha para Yulieski Gurriel, al menos así lo dejó ver el año pasado y deberá tener una similar para superar varios de sus topes.
De acuerdo con las posibilidades que sugieren sus actuales estadísticas y la cantidad de juegos que aún deben disputar los Astros de Houston (61, antes de la jornada de este domingo), el “Yuli” se quedará un hit por debajo de igualar su máxima marca (158, en 2017) y quedará con 38 dobletes, cinco menos de su récord personal (43, en 2017).
Debería, desde ahora, superar las 75 impulsadas que registró el año pasado, pues las proyecciones lo ponen con 85. También empataría las 69 anotadas que consiguió en 2017 y se poncharía menos que en la zafra anterior, cuando lo retiraron en 62 ocasiones por la vía del tercer strike. Para esta vez, apunta a 55.
DATOS en pocas líneas:
-En su primera temporada con los Indios de Cleveland, Yonder Alonso podría terminar con 94 impulsadas que desplazarían notablemente su récord personal anterior: 67, en 2017.
-Yoan Moncada cerraría la ronda regular con 224 ponches. Esa no solo sería la máxima cantidad para un jugador de los Medias Blancas de Chicago (222), sino que establecería un récord en las Grandes Ligas, pues quedarían atrás los 223 de Mark Reynolds en 2009 con los Diamondbacks de Arizona.