El dominicano Rafael Devers volvió al terreno de juego para enfrentar a Cleveland Guardians, tras ausentarse por poco más de una semana, debido a dolencias en su rodilla izquierda. En su regreso fue uno de los peloteros más determinantes en la victoria 8-0 de Boston Red Sox.
Dicho choque fue el segundo de una serie de tres, que se efectuó en el «Progressive Field«, ubicado en Cleveland, Ohio. Asimismo, el manager Alex Cora alineó a Devers como segundo en el orden al bate y bateador designado, para enfrentar los envíos del abridor venezolano Carlos Carrasco.
Rafael Devers marcó su mejor actuación en la actual temporada, luego de ligar sencillo en su primer turno, ante un cambio a 88.1 MPH, que devolvió de línea al jardín central. Ya en su segunda oportunidad de la noche volvió a entrar en circulación, tras negociar un boleto de libre tránsito al inicio del tercer inning.
El mejor turno de Rafael Devers llegó en el quinto episodio, momento en el que silenció el Progressive Field, tras demostrar todo su poder ante el pitcher venezolano. Luego de tres envíos consecutivos en la esquina de afuera, Carrasco repitió la dosis con un cambio y Devers no desaprovechó la oportunidad para mandar la pelota a 403 pies del jardín izquierdo; a una velocidad tope de 109 MPH. Con este batazo se amplió la ventaja a tres carreras por cero.
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Devers guio ofensiva de Boston Red Sox
Más tarde, en la sexta entrada, Boston Red Sox se encargó de fabricar un total de tres carreras, para liderar 6×0 de forma parcial, con el protagonismo una vez más de Devers, quien luego de un largo turno de seis pitcheos conectó el cuarto doble de la campaña e impulsó desde tercera a Ceddanne Rafaela.
De esta manera, Rafael Devers solo debió batear un triple para concretar el ciclo. A pesar de una gran actuación ante los lanzadores de Cleveland, en el último turno de la noche, se ponchó en cuenta de 2-2.
Aunque el dominicano no pudo completar la hazaña cerró el juego con una gran labor; al culminar de 4-3, con un hit, doble, cuadrangular y boleto. Además, anotó dos e impulsó la misma cantidad para aumentar su promedio de bateo a .231 y su OPS a .846.
Por último, Boston Red Sox utilizó el gran trabajo colectivo en la ofensiva para ganar el juego número 14 de la campaña. En tanto, el pitcher Cooper Criswell (1-1, 2.38) se adjudicó la victoria al trabajar por espacio de cinco entradas completas, en las que permitió tres sencillos y abanicó a la misma cantidad de rivales.
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