Pese a que septiembre está siendo un mes bastante inconsistente ofensivamente para Rafael Devers, la estrella de Boston Red Sox sigue buscando la manera de aportar a su equipo, y en la jornada de este jueves 19 de septiembre ayudó con una joya defensiva en la tercera base.
Aunque el dominicano es más conocido en Grandes Ligas por sus grandes herramientas con el madero, no deja de ser un defensor que, en ocasiones, puede deslumbrar en la esquina caliente, tal y como lo demostró contra Tampa Bay Rays.
En la quinta entrada, con Yandy Díaz tomando turno al bate, Rafael Devers completó una jugada con bastante exigencia, luego de que el cubano conectara un sinker a 95.6 millas por hora del abridor Brayan Bello por toda la tercera base, pero en terreno corto.
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El lento batazo obligó a «Carita» a correr con fuerza hacia adelante, exigiéndose al máximo, porque una vez que llegó debió bajar su centro de gravedad en plena carrera para tomar la pelota de la única forma posible para sacar out; a mano limpia.
Una vez que tuvo posesión de la esférica, Rafael Devers sacó rápidamente un certero lanzamiento hacia el inicialista Triston Casas, que poco tuvo que esforzarse, y aunque el cubano hizo su mayor esfuerzo para llegar quieto a la primera base, el dominicano logró sacarlo de out por un paso de ventaja.
Y pese a que el antesalista no acostumbra a hacer jugadas de gran impacto en la tercera base, anteriormente ha demostrado que puede ser un buen defensor, con un poco más de consistencia, algo que este año parece haber logrado, tomando en cuenta que tiene 12 errores, su cifra más baja desde que debutó en 2017 con Medias Rojas.
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El porcentaje de fildeo de Rafael Devers este año es de .959, su segundo más elevado, tan solo detrás del .964 que compiló en 2022, año en el que cometió 14 pifias.
El bate de Rafael Devers está apagado
Sin contar el juego de este jueves contra Tampa Bay Rays, el dominicano tan solo batea en septiembre para .193, sin jonrones y con tres carreras impulsadas en 16 juegos.
Incluso, en la segunda mitad promedia .248, con apenas cinco cuadrangulares, luego de registrar average de .291, con 23 vuelacercas previo al All-Star Game.
La poca producción ofensiva de Rafael Devers ciertamente le está pasando factura a Boston Red Sox, que está muy lejos de entrar en los puestos de Comodín de la Liga Americana.
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