Cuando se menciona a Randy Arozarena es para hablar sobre una de las superestrellas que tiene Major League Baseball (MLB), pues el jardinero es considerado figura dentro de la organización Tampa Bay Rays, equipo llamado a ser protagonista en la venidera temporada 2024.
Con ya cinco años de carrera, desde su debut con St. Louis Cardinals en agosto de 2019, el nacido en Mantua goza de grandes logros. Empezó fuerte al ganar el Novato del Año de la Liga Americana y en el pasado curso fue seleccionado para participar por primera vez en el Juego de Estrellas de MLB.
Esto hace pensar que su desempeño en 2024 será similar o mejor. No obstante, había cierta preocupación dentro de la franquicia de Tampa Bay Rays, debido a su accionar en el Spring Training.
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Randy Arozarena espera despertarse antes del Opening Day
Luego de seis encuentros de pretemporada efectuados, Randy Arozarena se encontraba en una mala racha, poco habitual para alguien de su nivel. En 17 turnos consumados, el cubano, quien registró 140 hits en 2023, no había podido conectar imparables. Incluso, en el primer juego de la Dominican Series, que se celebra en Santo Domingo, se fue de 3-0 ante Boston Red Sox.
No obstante, el jardinero contó con revancha inmediata en el segundo día de la serie frente a los patirrojos. Como tercero en el orden y desempeñándose en jardín izquierdo, salió a tomar su turno 18 en esta pretemporada.
Le tocó luego de que Jonathan Aranda se embasara por boleto con un out en la pizarra. Apenas era el primer inning del encuentro y se enfrentó al derecho Garrett Whitlock, quien lanzó un strike para abrir la cuenta con una curva a 81 millas.
Eso solo sirvió para que Arozarena le tome la mano y en su segundo envío no perdonó un sinker por el centro, el cual llevó por el jardín central a una velocidad de 108 millas. Tampa Bay creó una amenaza con par de hombres en las almohadillas, pero no logró anotar carreras.
Luego, con mayor confianza, se paró nuevamente en la caja de bateo. Esta vez era la parte alta del tercer episodio y ya los de Florida habían roto la paridad tras error que permitió que Francisco Mejía anotase. Pero, todavía seguía el peligro para Boston.
Esto lo aprovechó el cubano, quien con Jhonny DeLuca en tercera y sin out, enlazó un elevado de sacrificio hacia el left field. Los 298 pies de distancia fueron suficientes para que DeLuca anote la segunda rayita de su equipo.
Tras este batazo, Randy salió de la mala racha. Todavía tiene 18 días para seguir elevando su porcentaje de bateo, previo al Opening Day el 28 de marzo, cuando Rays reciba a Toronto Blue Jays en el Tropicana Field.