Por Ruby Arés
El Real Madrid se ha marchado a las vacaciones de Navidad tiritando. No por el frío de invierno, pero si por la cantidad de puntos que se han ido dejando según pasaban las jornadas en el campeonato doméstico.
El cuadro merengue afrontaba está temporada con la idea de revalidar el torneo liguero, algo que no hacen desde las campañas 2006-2007 y 2007-2008. Pero la sangría de puntos ha dejado a un Real Madrid muy tocado, y casi hundido (van cuartos, por detrás de Barcelona, Atlético y Valencia), en la clasificación. Los azulgranas ya se han proclamado campeón de invierno, le faltan dos jornadas más para completar la primera vuelta. El Barcelona aventajan al eterno rival en 14 puntos, una distancia que los blancos nunca en su historia han logrado recortar.
Mientras que Zidane y su plantilla piden paciencia a la afición, son los que han brindado en 2017 el mejor año de la historia del club, los tropiezos se suceden. Ya van 7 en 17 jornadas. Muchas para un equipo que soñaba en agosto con el ansiado ‘sextete’ en una misma temporada, algo inaudito en la historia del fútbol.
En total, 17 puntos se han quedado por el camino. Casi los mismos que se dejaron en la pasada edición de la Liga: 21. Acumulan cuatro empates y tres derrotar y todavía quedan 22 jornadas más. Toda hace indicar, salvo un regreso épico, que superaran la cifra del año pasado.
El primer tropiezo se dio en la segunda jornada, ante el Valencia. Los ches solo se llevaron un punto del Bernabéu gracias a que Asensio empató a dos a siete minutos del final. Desde entonces, se sucedieron los empates y las derrotas. El Levante (1-1), Atlético de Madrid (0-0) y Athletic (0-0) han sido los otros equipos que sumaron un punto ante los blancos. Betis (0-1), Girona (2-1) y Barcelona (0-3) lograron doblegar a los vigentes campeones.
Perder ante el Betis fue una verdadera sorpresa. El Madrid iba a superar el récord del Santos de Pelé, 73 partidos consecutivos marcando, pero se vieron incapaces de batir a Adán. Y la última derrota, ante el Barcelona, hace casi oficial que los blancos se apean de la lucha por el título. Diecisiete puntos perdidos, una auténtica sangría a la que debe poner remedio Zidane tras las Navidades.
