El mundo alrededor de los latinos en Major League Baseball no deja de ser tendencia. Ahora, destacamos el regreso del boricua, Javier Báez.
El campocorto boricua fue puesto en la lista de duelo por el sensiblemente fallecimiento de su abuelo en días atrás.
Además, esto le sirvió también como pequeño descanso para recuperarse de una molestia por la cual salió del juego el sábado pasado.
Este viernes, Detroit Tigers y Cleveland Guardians protagonizaron una doble cartelera desde el Progressive Field, el puertorriqueño vio acción en el segundo encuentro.
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Como sexto en el orden y parador en corto, A.J. Hinch alineó a Javier Báez en la jornada.
En su primera oportunidad al bate, ante los envíos de Xzavion Curry, falló su turno luego de ver dos pitcheos.
Para la parte alta del cuarto tramo, el infielder latino consumió su segundo turno en el cajón de bateadores con dos outs.
Detroit estaba con ventaja en la pizarra y al primer lanzamiento el hábil toletero se embasó por infield hit al shortstop pero después cayó el tercer out.
Contra en relevista Nick Sandlim, en la alta de la séptima, Javier Báez abrió la entrada con sencillo a la pradera derecha.
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Luego de tres bolas malas, el boricua con mucha agilidad salió al intento de robo y consiguió estafar la segunda almohadilla.
Ya en la parte alta del noveno, frente al cerrador Emmanuel Clase, contra las cuerdas el toletero de Tigers falló con batazo al jardinero central.
De esta manera, Javier Báez terminó la jornada de 4-2 con una base robada, llegó a 11 en esta zafra y a 101 de por vida en Las Mayores.
El grandeliga puertorriqueño, batea para .224, con siete cuadrangulares y 50 carreras remolcadas.
Al final de esta jornada, Detroit y Cleveland no se hicieron daño, dividieron honores en el doble compromiso del día.