En un duelo con amplio dominio de los lanzadores, en el que hubo un no hit no run hasta el octavo episodio y el doble de Marcus Semien, el cubano Julio Pablo Martínez hizo lo que sus compañeros no lograron y sumó un inatrapable a su registros en MLB.
El conjunto pegó solamente tres inatrapables en el duelo ante Los Angeles Angels, choque que acabó 2×0 y se decidió con par de jonrones; primero de Shohei Ohtani en la entrada inaugural y luego de Matt Thaiss en el noveno capítulo.
Rey Detmers dominó a su antojo a los bateadores locales en el «Globe Life Field», entre ellos a José Adolis García, quien falló en cuatro oportunidades y se ponchó en par de ocasiones.
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Ante la escasez productiva de los bateadores texanos en el enfrentamiento, Julio Pablo recibió la oportunidad de consumir un turno ofensivo en la parte baja del noveno episodio, momento en el que asumió la responsabilidad de ser bateador emergente por su compañero Ezequiel Durán, quien ocupaba la sexta plaza en la alineación.
Julio Pablo Martínez llegó para quedarse en MLB
Durante esa visita al cajón de bateo, el antillano enfrentó al relevista Carlos Estévez, quien toleró un indiscutible de Mitch Garver iniciando el último episodio del enfrentamiento.
Frente al oriundo de Guantánamo, Cuba, el cerrador realizó cinco pitcheos, todos por encima de las 97 mph. En conteo de dos strikes e igual número de bolas, el antillano sonó su octavo inatrapable de su corta experiencia como jugador de la Gran Carpa.
Julio Pablo Martínez participó en su sexto juego de la temporada ligamayorista, en los que acumula 19 visitas al cajón de bateo y ocho indetenibles, entre ellos un doble, cinco carreras anotadas y dos remolques. En tanto, su promedio ofensivo es de .421.