Cuando se miden Real Madrid y Bayern Munich hay siempre una expectativa enorme en el mundo del fútbol. Entre ambos hay un total de 20 títulos de UEFA Champions League. Pero este miércoles 8 de mayo se dio una nueva edición de esta rivalidad. Una de las más grandes en el viejo continente.
Ya Borussia Dortmund logró dar la sorpresa mayúscula del torneo al eliminar en la otra semifinal a Paris Saint Germain (PSG), de Kylian Mbappé. Ahora era el turno de saber si se daría una final inédita en la Liga de Campeones o por el contrario, habría una repetición del cotejo que definió al campeón de 2013.
El empate 2-2 en el Allianz Arena de Munich dejaba todo abierto para que se definiera todo en el mítico Estadio Santiago Bernabéu de la capital española.
El Bernabéu fue testigo de otra hazaña de Real Madrid
Más de 80 mil espectadores llenaron este recinto para ver ganar a los suyos. El objetivo era acceder a una nueva final de la UEFA Champions League, algo que Real Madrid logró por última vez en 2022, año en el cual derrotó a Liverpool para levantar la «orejona» por decimocuarta vez.
Pasaban los minutos y la tensión crecía. Algo característico de este tipo de compromisos. Una igualdad sin goles que parecía no romperse. Incluso, la posibilidad de una prórroga y unos eventuales penales no parecían algo extraño, en caso de que llegase a suceder.
No obstante llegó el minuto 67. Ahí Alphonso Davies la tomó por la banda izquierda e hizo gala de su velocidad y habilidad al momento de encarar al arco rival. Poco le importó tener al frente a un gran defensor como Antonio Rüdiger. El canadiense avanzó unos metros, recortó para cambiar de perfil y remató con un potente derechazo que se coló en la arquería defendida por Andriy Lunin.
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Real Madrid siguió intentando igualar y cuando parecía que todo era felicidad con el tanto de Nacho, el defensor del conjunto blanco cometió una falta sobre Joshua Kimmich. El gol fue anulado y el partido siguió 1-0. Las esperanzas se iban hasta que salió a relucir aquel espíritu de campeón que hacen de este el club el más ganador del mundo.
Un mal despeje de Manuel Neuer le dejó en bandeja de plata el balón a Joselu, quien no desaprovechó la oportunidad e igualó las acciones en el 88′. Pero la locura que se desató en el Bernabéu no paró ahí. Tan solo par de minutos después, envalentonados, los madrileños siguieron imponiéndose en el área rival.
El balón le llegó a Rudiger, que no dudó en enviar el balón al borde del área chica y luego de que todos vieran pasar la esférica, esta le llegó a Joselu, que se convirtió en el héroe de otra hazaña en la «Casa Blanca» al anotar el 2×1 definitivo. Fue una noche histórica en el hogar de Real Madrid, que buscará la Champions League número 15 de su historia.
Wembley Stadium de Londres, Inglaterra, será el escenario en el cual se llevará a cabo la final de este torneo. Allí se verá las caras, el próximo 1 de junio,a Borussia Dortmund, otro rival alemán.
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