Marcos Conde
En la tarde de este viernes, 21 de julio, St. Louis Cardinals y Chicago Cubs inauguraron en el Wrigley Field la jornada de Grandes Ligas.
Chicago (45-51) y San Luis (44-53) llegaron al encuentro ocupando la tercera y cuarta plaza de la División Central de la Liga Nacional respectivamente.
Se jugaba por mucho en este encuentro, dada la paridad que ambos elencos poseen actualmente en la tabla de posiciones.
Los locales peleaban por despegarse de su más cercano perseguidor, mientras que para los de San Luis un triunfo representaba recortar distancias y acercarse a su objetivo de escalar puestos en la tan peleada división que actualmente dominan Milwaukee Brewers (54-43) y Cincinnati Reds (52-46).
Apenas en la parte alta de la segunda entrada los visitantes golpearon primero y se pusieron delante en el marcador de forma atípica ante Chicago.
Te puede interesar: ENCENDIÓ REDES: Miguel Cabrera recibió DURAS CRÍTICAS de Juan Vené
St. Louis Cardinals conectaron en el inning tres imparables consecutivos de Tyler O´Neill, Jordan Walker y Paul De Jong en ese orden, dejando situación inmejorable de bases llenas y solo un out para su octavo hombre en la tanda, Andrew Knizner.
Knizner, conectó rodado por zona de la antesala y fue retirado en primera, pero bastó para inaugurar la pizarra.
De esta manera se puso por delante la visita en el marcador sin sacar siquiera la pelota del cuadro al abridor de Cubs, Justin Steele.
Para el receptor de St. Louis Cardinals esta fue su carrera impulsada número 17 de la campaña y llegó en momento inmejorable para los suyos.
Una vez más, Andrew Knizner aprovechó el descanso de los arreos del catcher titular de Cards, Willson Contreras, para demostrar su potencial.
Finalmente, Cachorros Chicago pudieron remediar la entrada y sacar el out restante sin que les anotaran nuevamente, pero fueron golpeados primero en su propia casa por Cardenales de San Luis.