El caos que se previó llegó y se adueñó de la realidad lamentable que inunda a Cuba en la actualidad. El movimiento atlético no escapó de los castigos de la mala gestión del oficialismo y este 14 de febrero se conoció de una radical decisión en la Mayor de las Antillas, que laceró gravemente al deporte cubano. Todos los torneos que estaban colocados en el calendario para el segundo mes del año fueron borrados en un segundo y ya no tendrán lugar.
No hubo cabida para la esperanza y las suspensiones de los eventos planificados a lo largo del país aparecieron, ante la incapacidad logística para sostener el desarrollo de estos. La crisis energética que se pasea por la isla se convirtió en la principal causa de este dictamen. Los representantes del deporte cubano son parte de la sociedad y al igual que esta sufren las carencias y la escasez de todo tipo.
Esta vez, el Instituto Nacional de Deportes Educación Física y Recreación (INDER), fue el ente gubernamental que tuvo a su cargo la tajante normativa. Orlando Cruz, periodista del sistema informativo en Cuba, replicó la noticia en la plataforma digital Facebook, como una manera de darle mayor relevancia a lo que sucedió.
«Nota informativa del organismo INDER: Considerando la situación energética que presenta el país y con el objetivo de contribuir al ahorro de energía, se suspenden todas las actividades deportivas previstas en el calendario deportivo nacional para el mes de febrero. Una vez restablecido la referida situación, las mismas serán reprogramadas».
Las suspensiones se adueñaron de Cuba
En el tintero estaban competiciones de relieve, como el Torneo de Clubes Campeones del beisbol cubano, el que debió comenzar la fase de cuartos de finales el próximo 15 de febrero. Este evento estuvo envuelto en polémicas y escándalos, entre las que destacó la que protagonizó el elenco de Granma, que resultó eliminado por no cumplir con el reglamento de la liza.
No habrá ningún tipo de actividad física organizada en el deporte cubano en lo que resta de este mes de febrero. La realidad tan tétrica que se extendió por cada rincón no distinguió entre los afectados y los sumió a todos en la misma situación. El presente del país se tambalea por enésima ocasión.
Los apagones sostenidos por más de 20 horas fueron el presagio de este final. La vida diaria de los habitantes del archipiélago padece a diario de largos episodios de sufrimientos. Lo que sucedió este 14 de febrero fue otro golpe entre tantos, los que parecen un proceder cíclico en Cuba de tanto repetirse.
El deporte cubano puso una obligada pausa a las lides que tenían en el tintero. La ineficiencia gubernamental dio otra muestra de sus constantes tropiezos y la errada conducción que hacen de cada aspecto del país. Las disciplinas atléticas no volverán al ruedo y no sabe cuando esto sea posible.
