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San Diego Padres ha tomado el control de los últimos compromisos tras el regreso de Luis Arráez. Una prueba de ello son las cuatro victorias de manera consecutiva y que además, para el tercero de la serie ante Pittsburgh Pirates de este domingo 4 de mayo, el criollo mostró gran velocidad en las piernas con un batazo lento.
Previo a la jornada dominical, el nativo de San Felipe estableció una extraordinaria línea de .375/.353/.563/.915 (AVG/OBP/SLG/OPS), con dos extrabases, cinco empujadas, dos anotadas y seis imparables en sus recientes cuatro partidos de temporada regular. Estos números han permitido que los frailes se mantengan en la lucha por el Oeste de la Liga Nacional.
En búsqueda de la barrida, el manager Mike Shildt inscribió a “La Regadera” como segundo en el orden al bate y defensor de la inicial, donde enfrentó al zurdo Andrew Heaney, a quien históricamente no la ha bateado muy bien (.167).
Luis Arráez mostró sus dotes de velocista
Para la apertura del segundo episodio, el careta Elías Díaz sacudió un jonrón solitario que extendió la ventaja de los visitantes. Luego de ello, Brandon Lockridge hizo lo propio con un doble por el derecho. Allí, Arráez compareció una vez más, con la misión de mover al corredor en posición anotadora.
El enfrentamiento entre ambos fue breve (tres pitcheos). Sin embargo, Luis Arráez decidió sonar un slider en la parte externa del cuadro, bateándola con mucha habilidad al territorio del campocorto Jared Triolo. Este, al notar que el corredor de la intermedia se movió, descuidó al pelotero venezolano, quien de inmediato le puso velocidad de home a primera para llegar a salvo.
Ese pequeño espacio de milisegundos fue lo que necesitó Luis Arráez para lograr embasarse. El anotador oficial le acreditó el imparable 32 de la temporada regular. Además de ello, subió su promedio de bateo hasta los .305 puntos, el onceavo mejor de la Liga Nacional.
San Diego Padres aprovechó para el rally
Con compañeros en los senderos, el arubeño Xander Bogaerts cargó con la responsabilidad de remolcar las carreras, luego que, en conteo de 0-1, se ajustó a un cambio de 82 MPH que alargó con fuerza (109.9 MPH) por lo más lejano del jardín izquierdo, batazo que convirtió en su noveno doble del año y por el error en fildeo de Jared Triolo, se fue hasta la antesala.
De esta manera, San Diego Padres ha sabido aprovechar cada espacio que deja el equipo contrario para usarlo a su favor. No por menos están a juego y medio de Los Angeles Dodgers por el Oeste de la Liga Nacional, división que estará peleada de principio a fin en este 2025.
Si la gerencia de los Padrés son inteligentes, amarran a Luis al menos cinco años, y serán contendientes de los Dodgers así será.
Los Padre deberían extenderle a Luis Arrae un multicontrato dado que el se siente a gusto con este equipo y no es un pelotero de poder pero tiene la garantía que en el momento de dar un batazo es el hombre indicado
EN NOMBRE DE DIOS ESTE SERA EL 4 TITULO DE BATEO DE ARRAEZ