Si tenemos que seleccionar el momento más brillante de Los Angeles Dodgers en la temporada 2024 de MLB, estamos seguros que ese sería en el que consiguieron el anhelado título de Serie Mundial el 30 de octubre, cuando Walker Buehler ponchó a Alex Verdugo y se desató la locura en Los Angeles y el Yankee Stadium apagó sus luces luego de una contienda exitosa, pero que no pudo coronar con el triunfo definitivo.
El juego, que comenzó con un dominio absoluto de New York Yankees, terminó con una victoria de 7×6 para Los Angeles Dodgers, quienes aseguraron su octavo título en la historia de la franquicia, el primero desde el 2020, aunque desde 1988 no lo hacían en una temporada completa.
En las primeras entradas, los locales tomaron una ventaja de 5×0, aprovechando la falta de control del abridor Jack Flaherty y algunos errores defensivos. La multitud en el Yankee Stadium estaba eufórica, anticipando una victoria que obligaría un sexto juego en Los Angeles
Los Angeles Dodgers mostraron espíritu de campeones en el juego definitivo
Sin embargo, Los Angeles Dodgers demostraron una vez más por qué son considerados uno de los equipos más grandes en la historia del beisbol y en la quinta entrada, comenzaron su remontada épica.
Aprovechando una serie de errores defensivos de Yankees y con bateos oportunos, lograron anotar cinco carreras para empatar el juego. Mookie Betts, Freddie Freeman y Teoscar Hernández fueron claves en esta entrada, cada uno contribuyendo con batazos que impulsaron carreras cruciales
Esta victoria marcó el octavo título de Serie Mundial para Los Angeles Dodgers, una franquicia con una rica historia en el béisbol. Sus títulos anteriores fueron en 1955, 1959, 1963, 1965, 1981, 1988 y 2020.El manager Dave Roberts expresó en ese momento su orgullo por el equipo, destacando la resiliencia y el espíritu de lucha que demostraron a lo largo de la temporada.
La tensión aumentó en las últimas entradas, Yankees volvió a tomar la delantera en el sexto con fly de sacrificio de Giancarlo Stanton pero en la alta del inning ocho dos flys de sacrificio de Gavin Lux y Mookie Betts sentenciaron el choque completando la remontada.
El momento culminante llegó en la novena entrada, con dos outs y sin corredores en bases, Walker Buehler, quien había pedido lanzar en este juego decisivo, se enfrentó a Alex Verdugo. En una batalla de nervios, Buehler lanzó una knuckle ball imposible que Verdugo no pudo conectar, sellando así la victoria y el campeonato para Los Angeles Dodgers.
“Nunca nos dimos por vencidos, incluso cuando las cosas se veían difíciles. Este equipo tiene un corazón enorme y hoy lo demostramos en el campo”, dijo Roberts luego de la victoria que fue el punto culminante de una campaña brillante que pasará a la historia de esta organización como una de las mejores de todos los tiempos.