Yasiel Puig no se detiene en Navidad y trabaja físico para LVBP

Paola García

El pelotero cubano Yasiel Puig continúa escribiendo su historia con batazos y con acciones que lo acercan a la comunidad.

El pelotero cubano Yasiel Puig continúa escribiendo su historia con batazos y con acciones que lo acercan a la comunidad.

El pelotero cubano Yasiel Puig demostró que la disciplina y la constancia forman parte esencial de su ADN deportivo. En horas de la mañana del 24 de diciembre de 2025, mientras muchos aprovechan la fecha para descansar o compartir en casa, Puig se presentó en las instalaciones del «Estadio José Bernardo Pérez» de Valencia para cumplir con una exigente rutina de trabajo físico y sin poner excusas cuando se trata de mantenerse en forma.

Desde tempranas horas, el jardinero antillano se enfocó en ejercicios orientados al fortalecimiento muscular, la resistencia y la movilidad, aprovechando los espacios del emblemático estadio valenciano, casa del conjunto al cual milita en esta temporada de la LVBP 2025-26: Navegantes del Magallanes.

Yasiel Puig siguió su plan deportivo a pesar del ambiente festivo que caracteriza la víspera de Navidad, panorama que decidió plasmar en las historias de su perfil oficial en la Red Social Instagram.

Así inició la Navidad Yasiel Puig

En medio del entrenamiento, el propio Yasiel Puig, fiel a su estilo espontáneo, soltó varias palabras que rápidamente se volvieron protagonistas del momento.

Entre risas y cansancio, el cubano expresó: “Este no quiere descansar brother (refiriéndose al trainer), déjame en paz brother, estamos en 24 (de diciembre) brother, tanto ejercicio, hay que descansar brother, ¿verdad mi gente?”.

El pelotero decidió enfocarse en su preparación deportiva en primera instancia. Para recopilar un poco, el atleta cubano en 24 juegos ha despachado 20 hits, cinco dobles y un jonrón; así como también, impulsó 11 carreras y ha anotado otras nueve, dejando su promedio madero en mano en .253.

Disciplina y espíritu navideño

La sensibilidad social del cubano también quedó reflejada el 23 de diciembre, cuando Puig visitó Café de la Paz, ubicado en el centro de Valencia, un espacio emblemático donde compartió con niños en la víspera de la Navidad.

Durante el encuentro, el jugador intercambió sonrisas, fotos y momentos especiales con los presentes, llevando alegría en una fecha tan significativa. La actividad fue recibida con entusiasmo por las familias, que valoraron el gesto del deportista en un contexto más allá del terreno de juego.

Todo este accionar resume bien la faceta actual de Yasiel Puig, quien ahora es un atleta enfocado en su cuerpo, pero consciente de su alrededor. Mientras muchos optan por la pausa total de las fiestas, el cubano sigue trabajando, sin perder el buen humor ni el contacto con la gente que lo admira.

Así, Yasiel Puig continúa escribiendo su historia con batazos y con acciones que lo acercan a la comunidad, demostrando que el compromiso y la Navidad pueden convivir en una misma agenda.

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