Por Juan Páez
Para describir la temporada que vive Yulieski Gurriel en 2019 en las Grandes Ligas, la frase que podría encajar de mejor manera es “de proporciones bíblicas”. El infielder de los Astros de Houston sigue bateando y lo ha hecho de tal manera que podría tener una de las mejores campañas ofensivas (o una de las más completas) en la historia de la Gran Carpa y emular a hombres inmortales del juego como Babe Ruth, Ted Williams y Lou Gehrig.
En la jornada de este sábado, en la derrota de los Astros de Houston 6-4 en manos de los Azulejos de Toronto, el “Yuli” tuvo una actuación perfecta de dos imparables en dos turnos legales, con su doblete número 38, dos impulsadas para llegar a 97 en el año y una base por bolas.
Lo que el nacido en Sancti Spiritus está a punto de hacer (y tiene 25 encuentros restantes de su equipo para lograrlo) es algo que hasta ahora solo se ha conseguido 115 veces en la historia y lo han alcanzado únicamente 73 peloteros.
No es algo más que un torneo con, como mínimo, 30 estacazos de vuelta completa, 40 biangulares, 100 carreras impulsadas y .300 de promedio con el madero.
En la lista, aparecen únicamente dos cubanos que lo lograron: Kendrys Morales, en 2009; y José Abreu, en 2017.
Pero lo mejor en el caso de Gurriel es que se convertiría en apenas el segundo en concretar la hazaña en su temporada de 35 años de edad o más. Se uniría a David Ortiz, quien con 40 años de edad brilló en su zafra de retiro.
Para eso, el slugger deberá conectar dos dobles más, otros tres cuadrangulares, remolcar un trío de rayitas y mantener su promedio al menos en .300 (actualmente en .309).
Apaleado
En la otra cara de la moneda, la campaña de Raisel Iglesias ha sido lo más parecido a una montaña rusa. Ahora, en los últimos días de agosto, el tren da un giro que lo tiene de cabeza en el aire, si es que eso puede parecerse a sus negativas actuaciones. De hecho, este sábado volvió a tener problemas y se anotó la derrota (2-11) y su quinto blown save del año.
El cerrador de los Rojos de Cincinnati, que perdieron la doble cartelera 10-6 y 3-2 ante los Cardenales de San Luis, no sacó siquiera un out. Le pegaron dos hits y le hicieron dos carreras limpias. Él fue responsable de la anotación que dejó en el terreno a su club en el segundo enfrentamiento del día.
En sus últimas cinco presentaciones, totaliza 11 hits recibidos y seis rayitas merecidas en 2.2 episodios, con cuatro ponches y dos jonrones. Su efectividad dio un brinco de 3.86 a 4.63. En las últimas dos apariciones no pudo retirar a un bateador.
Así le fue al resto de cubanos que vio acción en la jornada de este sábado en las Grandes Ligas:
Yordan Álvarez (HOU) está en un pequeño slump en el que liga para .200 de average en sus últimos 12 juegos, pero aun así en ese lapso tiene cuatro dobles, dos jonrones y siete remolcadas, con 12 boletos recibidos.
Ayer se fue de 3-0, con anotada, pasaporte y ponche.
Yoan Moncada (CWS) ligó de 5-1, empujó una carrera, anotó otra y se llevó un abanicado.
Su compañero José Abreu pegó un sencillo en tres turnos, anotó dos carreras y recibió dos bolazos.
En el doble juego de su equipo, José Iglesias (CIN) pegó de 5-1, con un ponche.
Jorge Soler (KC), de 4-1, con base por bolas y dos abanicados.
Yasmani Grandal (MIL) tomó dos boletos, pero se ponchó en sus dos turnos oficiales. Yasiel Puig (CLE) no tuvo suerte en cuatro chances.
Tanto Yonder Alonso (COL) como Adeiny Hechavarría (ATL) y Aledmys Díaz (HOU) se fueron de 1-0, con un chocolate para cada uno.
Yoan López (ARI) se anotó su vigésimo hold, al lanzar 0.2 innings y propinar un ponche.
Aroldis Chapman (NYY) tiró 1.0 entrada en blanco de dos boletos y par de guillotinados.