Por Juan Páez
Entre las tantas historias a seguir que tendrá la temporada 2021 de las Grandes Ligas para los peloteros cubanos, hay dos que hablan de actuaciones superlativas. Los posibles 40 jonrones de Yordan Álvarez y los 30 cuadrangulares más 30 bases robadas de Luis Robert. Pero a este punto, cuando apenas empiezan los Entrenamientos Primaverales, ¿cuál de las dos podría ser más probable?
Para evaluar tales posibilidades hay que irse al pasado. En 2019, el año de su estreno en las Mayores, Álvarez (de 23 años de edad) sacó 27 pelotas del parque en solo 87 juegos. Si se combina con los vuelacercas que conectó ese mismo año en Ligas Menores, la marca llegaría a 50, pues en Triple A mandó a volar otras 23 bolas. Es decir que la capacidad está allí, al igual que el poder y una alineación de los Astros de Houston que puede protegerlo y permitirle ver buenos lanzamientos.
En el caso de Robert, quien no cumplirá 24 años hasta el 3 de agosto, las aptitudes de este son de un pelotero de cinco herramientas que, más pronto que tarde, puede convertirse en una de las caras del juego. En el torneo anterior, su primero en el big show, disparó 11 jonrones y se robó nueve bases en apenas 11 intentos en 56 enfrentamientos y 227 apariciones al plato. La Pantera ya sabe lo que es lograr un 30-30, algo que alcanzó en 2019 en las filiales de los Medias Blancas de Chicago en las Ligas Menores.
En situaciones normales, por cómo se mostraron los dos jugadores en sus primeras exhibiciones en las Mayores, quizás Álvarez y sus 40 cuadrangulares fueran los seleccionados. Pero hay un factor de riesgo en el bateador designado de los Astros. Perdió prácticamente todo el año pasado debido a una cirugía en las dos rodillas y hay que ver cómo regresará a la acción el slugger zurdo. No hay que descartar la posibilidad de que los siderales planeen llevarlo con cuidado.
A esto se le suma que Robert tendrá el chance de disputar su primera temporada larga en la Gran Carpa. El año pasado su proyección para 162 juegos, basada en su actuación, fue de 32 estacazos de vuelta completa y 26 cojines estafados. Pero obviamente existe la probabilidad de que el jardinero central mejore, se ponche menos, se embase con mayor frecuencia y, en general, muestre con más fuerza la gran ofensiva que exhibió en Ligas Menores.
Aunque decimos que es más probable un 30-30 para Robert en 2021, ambos escenarios son posibles. Será cuestión de que este último sea constante y de que Álvarez despeje todas las dudas en relación al estado de las rodillas y esté completamente saludable y listo para volver a atormentar a los lanzadores rivales.
La temporada 2021 de las Grandes Ligas será una gran oportunidad para demostrar que los dos bateadores que dominarán la siguiente generación cubana, Robert y Álvarez, están listos para comenzar su era en el más exigente nivel de la pelota.
