Tabla de contenidos
La historia de éxitos del pitcher cubano Liván Hernández en MLB es más que conocida, así como la odisea que vivió para alcanzar semejantes resultados. En la presente nota recordaremos la génesis de esa acción, pues viajaremos en la máquina del tiempo y nos adentraremos una vez más en el instante en el que el atleta creó los planes para escapar de una delegación cubana y comenzó sus pasos en el beisbol profesional.
Juan Ignacio Hernández Nodal, el agente MLB que posibilitó semejante desenlace, narró en exclusiva para nuestro medio de comunicación Swing Completo como inició su contacto con Liván Hernández y contó el instante exacto en el cual el pelotero tomó la decisión de desertar de un equipo Cuba.
La relación entre las partes inició con un asunto fuera del beisbol, pues Hernández Nodal le facilitó a Orlando «Duque» Hernández un medicamento que el capitalino necesitó para su hija. Sin embargo, este hecho impactó a Liván Hernández, quien confió en el agente que ayudó a su hermano y le expresó que iba a tener noticias de él muy pronto.
Sentimiento de agradecimiento de Liván Hernández
«Liván Hernández me dijo que estaba muy agradecido por lo que yo había hecho pero le comenté que eso era una cosa humana. Él me dijo que me iba a llamar, pero yo nunca pensé que lo iba a hacer porque yo nunca fui atrás de él ni nada de eso«, dijo el especialista.
Sin embargo, la realidad demostró que el pitcher habló en serio. El campeonato mundial de beisbol que se celebró en México en el año 1995 fue el punto cero. Liván Hernández, quien formó parte del staff del equipo Cuba en dicho torneo, tomó las medidas y se comunicó con Juan Ignacio Hernández Nodal. Obviamente, la vía fue segura y así lo reveló el agente en la conversación que sostuvo con el periodista Daniel de Malas, CEO de nuestro medio de comunicación Swing Completo.
«Yo me voy de vacaciones y cuando regreso a mi casa en Miami el 23 de septiembre del año 1995 mi mamá me dijo que me habían llamado por cobrar desde México y que me iban a volver a llamar ese día. En efecto, a las 10 de la noche me entra una llamada por cobrar de México y para sorpresa mía era Liván«, recordó.
«Me dijo con estas palabras: ‘Oye, ya yo estoy listo’ y cuando le pregunté quién era me dijo que era Liván, el hermano del «Duque». Cuando me dijo eso lo reconocí y cuando le pregunté que para qué estaba listo respondió: ‘Yo me voy a quedar ‘. Ahí comencé a temblar y le dije a Liván que me diera 10 minutos para confirmar. Llamé a mi primo (el famoso agente Joe Cuba) y le dije lo que pasó y me respondió: ‘Vamos para allá'», rememoró.
Enrevesado contacto
Juan Ignacio Hernández Nodal, junto a Joe Cuba,se trasladaron a México para completar el plan de huida. Sumar un lanzador de un equipo nacional siempre es un punto favorable y ellos tuvieron en sus manos esa posibilidad. Pero, el contacto con el atleta se entorpeció por la falta de comunicación.
«Cuando llegamos a Monterrey alquilé un carro porque yo no sabía en que estadio estaban ellos. Ni Liván Hernández lo sabía. Primero fuimos al estadio de los Sultanes y me dicen que ahí no era. Cuando llegamos al estadio la Siderúrgica me dicen que ellos estaban en el que ya habíamos ido y les comenté que ya había pasado por allí, pero me dijeron: ‘Vaya, que seguro ellos entrenan por la tarde’, como en efecto ocurrió«, dijo Juan Ignacio Hernández Nodal.
¿Qué sucedió después? ¿Cómo se efectuó el plan de fuga? En posteriores notas tendrán esas respuestas, pero era necesario ahondar más en aquella conexión que se estableció entre los protagonistas y la llamada que originó todo el proyecto.
Si desea ver la entrevista completa de Juan Ignacio Hernández Nodal, HAGA CLICK AQUI
Para más información del beisbol cubano haga click aquí
Cronista del Universo Atlético y Analista de Béisbol con experiencia en varios sitios web. Licenciado en Cultura Física con 17 años como entrenador deportivo. Desde marzo de 2023, miembro del equipo editorial de Swing Completo para la cobertura de Grandes Ligas y Pelota Cubana.