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El exlanzador José Contreras fue durante varios años, en la década de 1990, el as del pitcheo de la selección nacional cubana de béisbol. Pero las falsas promesas de las autoridades de la isla lo llevaron a abandonar su país y buscar una nueva vida en los Estados Unidos.
Según palabras del propio José Contreras, en Cuba le prometieron un hogar, pero nunca se lo dieron. Su vivienda necesitaba reparaciones urgentes y durante dos años esperó la asistencia prometida que tampoco llegó. Además, en 2002 su auto se averió, pidió ayuda para repararlo y nunca la recibió. Estas y otras acciones, marcaron el destino del que es considerado como uno de los mejores lanzadores cubanos de todos tiempos.
La humillación fue demasiado para un hombre orgulloso que no tenía nada más que demostrar en el béisbol amateur. Es por ello que el entonces primer abridor de la selección nacional cubana decidió desertar. Lo hizo durante la Serie de las Américas celebrada en Saltillo, México, en 2002 (a los 30 años).
El 1 de octubre, en dicho torneo, José Contreras lanzó un juego completo de seis hits y una carrera contra la República Dominicana. Solo él sabía que aquella sería la última de sus 14 victorias vistiendo el uniforme del equipo Cuba. Junto al entrenador Miguel Valdés eludieron a sus acompañantes en el hotel donde se hospedaban y viajaron más de 2100 kilómetros hasta Tijuana, cerca de la frontera con Estados Unidos.
En un abrir y cerrar de ojos, José Contreras se convirtió en millonario
Luego de una breve estancia en Nicaragua y ser considerado agente libre internacional, José Contreras firmó en diciembre de 2022 un contrato por cuatro años y 32 millones de dólares con la emblemática franquicia de New York Yankees. No sin antes haber rechazado varias propuestas tentadoras, como la de Pat Gillick y Toronto Blue Jays. Pero el agente Jaime Torres le aconsejó a su cliente que mantuviera la calma, convirtiéndose finalmente en un lanzador del equipo neoyorquino.
En MLB, José Contreras debutó el 31 de marzo de 2003 ante Toronto Blue Jays. Aunque le conectaron un par de imparables, regaló dos boletos y le fabricaron dos carreras (limpias), demostró que podía triunfar al máximo nivel, abanicando a cuatro rivales en 1.2 entradas de actuación. El antillano de 6’4 de estatura, contaba en ese momento con 31 años, una edad atípica para estrenarse en la mejor liga de béisbol del planeta. Aún así, su trayectoria ligamayorista es digna de reconocimiento, logró mucho en 11 años de carrera.
La edad nunca fue un impedimento para José Contreras
A pesar de llegar a MLB con una edad avanzada, el «pinareño» se las arregló para triunfar y dejar un legado ejemplar para los peloteros cubanos. Su entrega, dedicación, disciplina y talento, hicieron posible que ganara un anillo de Serie Mundial (2005) y fuera un All Star (2006).
Ambos logros fueron representando al equipo de Chicago White Sox. Precisamente en esas dos campañas (2005 y 2006) alcanzó sus mejores números. Aunque en 2010 como relevista con Philadelphia Phillies, también tuvo una destacada actuación. De por vida en las Grandes Ligas registró un récord de 78-67 y efectividad de 4.57 en 299 juegos (175 aperturas). Por cada nueve entradas de labor permitió 9.0 hits y abanicó a 6.8 contrarios.
Tampoco le fue mal en Cuba. En 10 Series Nacionales de Béisbol (SNB), José Contreras registró marca de 117-50 y una efectividad de 2.82. Junto a su gran amigo y también lanzador de los equipos Cuba, Pedro Luis Lazo, conformó una dupla estelar que lideró el staff de pitcheo del conjunto Vegueros (Pinar del Río) durante dos lustros. El orgullo de Las Martinas fue una estrella desde la lomita y mantuvo una conducta ejemplar dentro y fuera del campo de juego. Es un paradigma para las próximas generaciones de peloteros cubanos.
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Historiador y Analista de Béisbol Cubano y MLB
Graduado en Cultura Física en 1995 en La Habana, Cuba. Especializado en la historia y análisis del béisbol cubano y de las Grandes Ligas (MLB).