Por Robiel Vega
Cuando restan semanas para que la temporada 2022 cierre definitivamente sus cortinas, ya se empieza, poco a poco, a calentar el mercado de invierno y particularmente en el campo corto hay varios nombres muy interesantes que deben estar disponibles como agentes libres para la próxima campaña.
El primero de estos nombres es sin dudas Trea Turner, el torpedero de los Dodgers, que cumplirá 30 años el venidero junio, es el más completo de todos, sin haber tenido su mejor año en 2022, logró una excelente línea de bateo de .298/.343/.466/.809 (AVE/OBP/SLG/OPS), además disparó 21 jonrones y empujó 100 carreras y aunque no es el robador de antaño, alcanzó a estafar 27 bases en 30 intentos.
Turner es elegible para recibir una oferta calificada y de seguro la tendrá, pero las probabilidades de que la rechace en busca de un mejor contrato son muy altas, por lo que muy presumiblemente quedará libre para 2023.
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Carlos Correa es otro que se lleva titulares, el puertoriqueño renunció a continuar con los Twins en los dos años que le restaban y los 72 millones que recibiría y volvió nuevamente al mercado en busca de un contrato multianual y que ronde los 300 millones, algo que no será fácil, dado que sus números en 2022 no fueron los mejores de su carrera y ya entra con un año más de vida, 29 para 2023.
Su defensa también cayó en relación al 2021, cuando se hizo del Guante de Platino, aunque a su favor está su excelente bateo y el alto número de partidos que juega por temporada, el 89 % en los últimos tres años.
Con Minnesota tuvo un gran final, pero durante largos lapsos de la misma fue bastante pobre, al final su línea ofensiva de .291/.366/.467/.834 fue muy positiva, pero sus registros de jonrones (22), impulsadas (64), anotadas (70) y extrabases (47), estuvieron muy por debajo de lo habitual.
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Otro nombre ilustre es Xander Bogaerts, quien muy probablemente optará por no continuar con los tres años de contrato restantes y 60 millones con los Red Sox, a menos que ambas partes acuerden una extensión antes. Si esto no ocurre, Boagerts recibirá una oferta calificada y la rechazará, para convertirse en agente libre por primera vez en su carrera.
El nacido en Aruba dejó línea de bateo en 2022 de .307/.377/.456/.833, con 15 jonrones y 149 de ISO, números estos muy por debajo de lo que es común en él, además, quedó en 73 empujadas y 84 anotadas, también inferior a sus mejores registros. Sin embargo, en defensa tuvo los mejores registros de su carrera, con cuatro carreras defensivas salvadas, 4.9 de calificación de zona máxima y cinco salidas por encima del promedio.
Para los que opinaban que el guante de Bogaerts era su principal defecto, ahora lo verán con otros ojos y a sus 30 años estamos en presencia, quizás, ante la versión más completa de él como torpedero.
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Además de estos cuatro nombres ilustres, dos cubanos destacan entre los veteranos que aún tienen mucho que aportar en el juego. José Iglesias, que cumplirá 33 años en 2023, fue considerado en algún momento uno de los mejores defensores de la MLB y después de un 2021 con números muy pobres con el guante, logró revertir esa tendencia con una gran temporada con Colorado.
Iglesias ha mejorado mucho sus frecuencias, en 2022 dejó línea de bateo de .292/.328/.380/.708, siendo sus números de poder, apenas tres jonrones, y su pobre tasa de boletos (3.6%), sus principales deficiencias.
Aun así, sigue siendo un torpedero de buenas prestaciones y es muy probable que, tal y como ocurriera en sus dos últimas agencias libres, reciba alguna oferta de un año.
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Otro que volverá a la Agencia Libre es Aledmys Díaz. El villaclareño jugó más de 45 entradas en al menos cinco posiciones (todo el cuadro y el jardín izquierdo) y aunque en sus inicios fue un torpedero natural, ya a sus 33 años es visto más como un utility, función que llevó por cuatro temporadas con los Astros de Houston.
Su bateo de .243/.287/.403/.690 en 2022, lo coloca por debajo de sus números habituales, aunque sus jonrones aumentaron (12) y su tasa de empujadas estuvo sobre la media de su carrera. Díaz seguramente recibirá algún contrato de un año y sobre todo, debe ser utilizado como utility y no como torpedero natural, aunque fue esta la posición en la que más se desempeñó este último año.
Fuente: Traderumors
