La edición de UFC 303 prometía mucha acción en el combate estelar, debido a la calidad de los oponentes. Al final, así ocurrió. El brasileño Alex Pereira y el checo Jirí Procházka dotaron de espectacularidad la noche del sábado 29 de junio en el T-Mobile Arena de Las Vegas.
«Poatan» llegó al escenario a defender el título mundial de la categoría semipesado en un llamado de última hora para salvar la cartelera, después de no poderse llevar a cabo el encuentro previsto entre Conor McGregor y Michael Chandler. El irlandés se lesionó y destruyó de un golpe los deseos de sus seguidores que querían reencontrarse con «The Notorious».
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Pero, Alex Pereira decidió asumir el reto y con apenas pocas semanas de preparación puso en juego su corona mundial. Procházka pensó que esta podía ser la oportunidad de volver a ocupar la cima que una vez ostentó, pero el sudamericano demostró ser un auténtico fuera de serie.
El inicio de las acciones fue de lujo, con ambos atletas a la caza de las debilidades del contrario. Jirí intentó derribar a «Poatan», pero este último se defendió exitosamente. Sin embargo, el nacido en Brasil enseñó rápidamente las razones que lo convirtieron en el mejor de su categoría de peso.
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Fulminante nocaut en UFC 303
Pereira culminó el primer asalto con un jab directo al rostro del checo, quien cayó a la lona. Procházka se salvó gracias a la campana, que sonó justo en el instante que Alex se dirigió a culminar la faena. Pero, ese impacto tuvo grandes consecuencias en el físico del afectado y esto quedó en evidencia segundos después.
El segundo round fue el último. El rey aprovechó la confusión que aún tenía su retador y puso punto final a la contienda. Pocos segundos fueron suficientes para el desenlace, ya que el monarca de UFC lanzó una patada que se estrelló en la cabeza del europeo.
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Procházka se derrumbó y no tuvo fuerzas para sostenerse. Esta vez no hubo escape y una combinación certera finiquitó el pleito. El árbitro detuvo el combate para evitar daños mayores.
Alex Pereira se mantuvo como el amo y señor de los semipesados y agrandó su leyenda un poco más. De esta manera, el as llegó a 11 victorias con apenas dos derrotas. «Poatan» dejó claro que es de los intocables en la disciplina de UFC. Muchos especialistas creen que su próximo paso es moverse a la categoría de los pesados e intentar convertirse en el primer titular en tres divisiones diferentes. ¿Se hará realidad?
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