Por Robiel Vega
Con incuestionables éxitos, los multicampeones cubanos Arlen López y Lázaro Álvarez hicieron valer los pronósticos y vencieron en sus respectivas peleas a sus rivales de turno, en ambos casos, de una trayectoria y calidad inferior al de los criollos.
De esta manera, suman 4 los miembros de los Domadores que han subido al encerado, con igual cantidad de victorias, algo que no es de extrañar pues entre todos ellos suman un total de 3 coronas olímpicas y 9 mundiales, además de acumular otras 3 medallas olímpicas e igual número de mundiales para el increíble total de 18 preseas de nivel mundial. Mucha historia en esos puños.
Lazarito, nuestro representante en los 57 Kg, tres veces monarca del orbe y dos veces bronceado olímpico, logró el éxito sin emplearse a fondo, una vez que el colegiado puso fin al combate en el segundo periodo por una cortadura en la cara de su contrincante, el iraní Daniyal Shahbakhsh, un púgil de apenas 21 años y con un subcampeonato en los juegos asiáticos como su mejor resultado previo.
Defensa infranqueable y golpes acertados, aunque no muy abundantes, fue la clave del éxito en un primer asalto que el pinareño Álvarez se llevó de manera unánime, manteniendo una ecuanimidad propia de su experiencia para no caer en la provocación del asiático quien en varias ocasiones le bajó completamente la guardia.
Ya en la mañana de Cuba, el Campeón Olímpico de Río 2016, Arlen López, hizo su debut en Tokio, venciendo con propiedad en un primer combate que siempre es difícil por aquello de «romper el hielo».
Arlen, a pesar de su juventud, tiene un palmarés muy amplio, destacando, además del título olímpico, su corona mundial en Doha 2015 y sus dos medallas de oro en Juegos Panamericanos (2015 y 2019). Completan su medallero, un título mundial juvenil en Yerevan 2009 y otro Centroamericano en Veracruz 2104 (plata en Barranquilla 2018).
Su experiencia y calidad pudo más ante un púgil cuyos mejores resultados son par de medallas de bronces en los Juegos del Mediterráneo 2018 y en los Juegos Africanos de 2019 como el argelino Mohammed Houmri.
Siendo fiel a su estilo de constantes intercambios y cambios de guardia, dominó sin dificultad e impuso su mayor calidad en los tres rounds. Con mucha seguridad y ecuanimidad, con una ofensiva organizada, fue asestando los mejores impactos y para ninguno de los 5 jueces hubo dudas del éxito del cubano.
El próximo representante de los Domadores en subir al ring de Tokio será el superpesado Dainer Peró, quien enfrentará al colombiano Cristian Camilo Salcedo en un pleito pactado para las 5:18 de la mañana hora de Cuba.
Peró, con una gran trayectoria en categorías menores, donde destacan sus títulos mundiales juvenil y de cadetes, además de su corona panamericana en Lima 2019, única medalla de oro en un evento de primer nivel de mayores, buscará, en estos juegos olímpicos, consagrarse como la principal figura de la división y romper así una sequía de títulos olímpicos en la división máxima del boxeo que data ya desde 1992, cuando Roberto Balado lograra el cuarto y último galardón dorado cubano en la categoría.
El boxeo, hasta el momento, va cumpliendo con los pronósticos en un momento donde la delegación cubana necesita más que nunca de su buque insignia. Por ahora es todo en cuanto al boxeo olímpico, mañana volveremos con más de los Domadores en Tokio 2020.