Andy Ibáñez puso en la pizarra a Texas en TARDE HISTÓRICA

Por Franco Miguel Alvariño En el primer juego de la jornada del jueves, 22 de julio, los Tigres de Detroit derrotaron 7×5 a los Rangers de Texas, en un duelo celebrado en el “Comerica Park”, sede de los “Vigilantes”. En dicho desafío, Andy Ibáñez, tuvo una de sus mejores actuaciones desde su debut en las […]

Por Franco Miguel Alvariño

En el primer juego de la jornada del jueves, 22 de julio, los Tigres de Detroit derrotaron 7×5 a los Rangers de Texas, en un duelo celebrado en el “Comerica Park”, sede de los “Vigilantes”. En dicho desafío, Andy Ibáñez, tuvo una de sus mejores actuaciones desde su debut en las Grandes Ligas, el pasado 4 de mayo de 2021.

El oriundo de la Isla de la Juventud, Cuba, abrió en la parte baja de la cuarta entrada el marcador para su equipo. Ibáñez visitó el cajón de bateo con dos compañeros en posición anotadora y un out en la pizarra. Mientras, en la lomita de los suspiros, el lanzador zurdo, Tyler Alexander, buscaba detener la rebelión local.

Andy, mostró carácter en el plato, en una situación importante del juego no se desesperó –lo que habla muy bien de la experiencia alcanzada-. El pinero dejó lanzar al serpentinero rival, este lo colocó en cuenta incómoda de dos strikes y una bola.

Para intentarlo dominar le enviaron una cutter a 87.3 mph hacia el plato. El cubano compró. Salió una conexión extraviada a lo corto del jardín derecho, un texas, y ninguno de los defensores pudo evitar que la bola tocara el césped.

De esa forma, Joey Gallo aprovechó para anotar la primera carrera del conjunto en el juego, a su vez, Jonah Heim avanzó a la antesala y el bateador quedó con vida  en la inicial.

Además de conseguir su octavo remolque en las Mayores, Ibáñez, concretó una tarde trascendental. Luego de 30 juegos disputados al máximo nivel del béisbol en los Estados Unidos, el jugador de cuadro de los Rangers consiguió su primer triple, mientras acumulaba un jonrón y cuatro dobles.

También, su productiva tarde con tres imparables en cuatro visitas al rectángulo de bateo representó la primera vez que consiguió esa cosecha de hits en un encuentro. Antes de iniciar el desafío sumaba par de juegos con dos indiscutibles, por lo que llegó a tres encuentros con múltiples imparables.

En 90 turnos legales alcanzó 20 inatrapables, de ellos seis extra bases. Además, remolcó ocho carreras y pisó la registradora en seis oportunidades. Sus resultados exhiben una línea ofensiva en ascenso .222/.245/.322 AVE/OBP/SLU.

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