Las jugadas defensivas en el béisbol siempre se comportan como ese plus extra para encender los ánimos de cualquier equipo o despertar el éxtasis de los presentes.

Esas joyitas obtienen más valor cuando se trata de un protagonista poco reconocido y aún más cuando su víctima es del calibre de un tal Juan Soto.

La narración tiene como objetivo principal de la intención al jardinero de origen latino (Puerto Rico – Curazao), Josh Palacios. El oriundo de Brooklyn se desempeñó este martes como jardinero izquierdo de Pittsburgh Pirates cuando recibieron la visita de San Diego Padres.

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Transcurría para ese entonces la alta del séptimo episodio cuando el dominicano, Juan Soto, se dispuso a tomar turno con dos outs en la pizarra y la tarea de acercar a los suyos.

Soto en teoría cumplió con su cometido, pero no contaba con Palacios. El batazo del quisqueyano voló hacia lo más profundo del jardín izquierdo y cuando parecía ser cuadrangular, el jardinero saltó muy habilidosamente, giro en el aire y tomó la bola de forma sensacional.

La jugada sorprendió a todos por lo complicado del asunto, parecía imposible tomar la bola allí, sin embargo, Josh Palacios se encargó de vencer las probabilidades, la lógica y las pretensiones de Juan Soto al robarle lo que hubiese sido su 15° cuadrangular del año.