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El criterio es unánime: Luis Giraldo Casanova ha sido el jardinero derecho más grande que dio el beisbol cubano. Sin embargo, en la estadística Carreras Producidas (CPR) no ocupa el primer puesto entre los jugadores que se encargaron de la posición.
Antes de proseguir, vale recordar que el indicador de marras permite valorar el aporte de los peloteros al equipo desde la sumatoria de sus carreras anotadas (CA) e impulsadas (CI), resultado al que deben restársele los cuadrangulares conseguidos.
Dicho esto, le informo que por encima del “Señor Pelotero” se alza el granmense Víctor Bejerano, quien es cierto que defendió la primera base durante una larga etapa de su carrera en el beisbol cubano, pero en sus inicios fue un rightfielder que acumuló miles de entradas al campo.
Víctor Bejerano, un hombre historia en el beisbol cubano
Bateador de raza, Bejerano produjo 2016 carreras apoyado en un impresionante total de 487 extrabases, los cuales le reportaron 1167 vueltas completas al infield y 1097 rayas subidas a la registradora.
Su estadística, tan sólida, supera inclusive a la del legendario pinareño que llevaba el ‘14’ en la espalda de la chamarreta, toda vez que Casanova (uno de los indiscutibles portentos del beisbol cubano) dijo adiós a los terrenos con CPR de 1904, como producto de 1147 anotadas y 1070 remolques.
¿Qué jardinero derecho sigue en la fila? Pues uno de los nombres más sonoros de la implacable Aplanadora de Santiago, el zurdo Fausto Álvarez.
Pelotero de bajo perfil, el indómito se cansó de dar palos, muchos de ellos a la llamada hora buena, y por ese camino acabó con 1757 carreras producidas (871 CA y la friolera de 1096 CI).
¿El mejor brazo de un outfielder en el beisbol cubano?
Esos tres elementos integran el podio y dejan para redondear el Top 5 de rightfielders del beisbol cubano al siempre respetado Eddy Rojas y al injustamente menospreciado Andrés Quiala.
El villaclareño, catalogado por muchos como el brazo más poderoso que se ha visto en las Series Nacionales, no llegó a ser el toletero que se vislumbraba, pero de todos modos se las ingenió para fijar un CPR de 1735, con 969 pisadas del plato y 948 empujadas.
Por su parte, el tunero destacó como bateador de tacto (hasta el punto de acumular más bases por bolas que ponches) y ancló muy cerca de Rojas con cosecha de 1722 en la estadística en análisis, número derivado de 1077 CA y 675 CI.
¿Y quiénes quedaron a las puertas de una plaza en el quinteto de oro? Mire usted, nada menos que dos figuras de enorme trayectoria en el beisbol cubano como el también villaclareño Andy Zamora (CPR de 1600, 932 CA y 699 CI) y el avileño Isaac Martínez (CPR de 1510, 800 CA, 842 CI).
Michel Contreras González
Periodista deportivo con treinta años de carrera. Graduado de Comunicación Social en la Universidad de La Habana, ejerció el periodismo en medios como Juventud Rebelde, Bohemia y Cubadebate antes de adherirse a la llamada prensa independiente, para la cual ha sido colaborador de la página deportiva en Oncuba, Cibercuba y Cubanet. Artículos suyos han aparecido en varias publicaciones extranjeras de habla hispana. Obtuvo numerosos premios en concursos de carácter provincial y nacional. Tiene publicados los volúmenes “Dioses Paralelos” (Ediciones Loynaz) y “Vuelos de Gavilán” (Unos y Otros Ediciones). Apegado fundamentalmente a la crónica, el comentario y la entrevista, la mayoría de sus textos versan sobre béisbol, fútbol y ajedrez, sin desdeñar el boxeo y el atletismo.
Esas estadísticas siempre serán lideradas por los que mayor tiempo jugaron. Dividala entre las comparecencias al bate y tendrán verdaderamente a los más efectivos.
Sin dudas Eddy Rojas tenía un brazo fuera de serie , pero no podemos olvidar a Capiro y Tomas Valido .