SE VIERON CARA A CARA: Chapman y su futuro a +100 MPH, Club de los 3 dígitos

El estelar cerrador cubano de los New York Yankees, Aroldis Champan, cumple por estos días con su plan de rehabilitación en el equipo Somerset Patriots, sucursal de Doble A de la franquicia en Ligas Menores. Esto, para poner a punto su brazo de lanzar y regresar a la Gran Carpa en lo antes posible, luego de estar alejado del box debido a una tendinitis.

Mucha sensación ha causado la presencia del cubano en las Menores, donde ya realizó su primera salida el viernes y este domingo debería volver a hacerlo, para valorar su estado actual.

En dicha presentación, Chapman trabajo una entrada, la séptima, sin permitir carreras, con un doblete soportado y un ponche propinado, llegando a marcar hasta 99 mph con su recta y 87 mph con la slider.

Un momento interesante fue, sin duda alguna, el cara a cara que tuvieron Chapman y el joven prospecto dominicano de los Yankees, el veloz derecho Luis Medina, quienes integran el Club de los Tres Dígitos en la franquicia. Evidentemente, fue solo un encuentro amistoso y que quedó en fotografía, la cual ha circulado en las redes sociales.

El dominicano de 23 años, quien firmó en 2015 como agente libre internacional por un bono de 280 mil dólares (además de 120 mil para estudios), tiene una recta que sobrepasa las 100 mph, una curva que llega a las 85 mph y un cambio superior a 90 mph, siendo uno de los mejores lanzadores de los Yankees en las Menores, a pesar de algunas dificultades que presenta con el control de sus pitcheos.

A pesar de estar lanzando en las Menores como abridor, Medina tiene características propias que lo señalan como el futuro cerrador de los Yankees en la MLB y, quien sabe, si pudiera estar subiendo esta misma temporada de 2022 a Triple A o la mismísima Gran Carpa.

De momento, el quisqueyano ya tuvo la oportunidad de ver cara a cara a Chapman, uno de los mejores cerradores de la historia de las Mayores, foto que guardará para toda su carrera. Es como el dicho que dice: «No es lo mismo llamar al león, que verlo venir».

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