Chapman VUELVE A GANAR aunque rompe racha

Por José Alejandro Rodríguez Zas Aroldis Chapman es el mejor cerrador de las Grandes Ligas. Se tenía que decir y se dijo. No solo por su impresionante y casi inmaculada actuación sobre el box, sino por las buenas vibras que trae para el su equipo, los New York Yankees y para sus compañeros, quienes buscan […]

Por José Alejandro Rodríguez Zas

Aroldis Chapman es el mejor cerrador de las Grandes Ligas. Se tenía que decir y se dijo. No solo por su impresionante y casi inmaculada actuación sobre el box, sino por las buenas vibras que trae para el su equipo, los New York Yankees y para sus compañeros, quienes buscan la manera de que el veloz y espigado lanzador salga por la puerta ancha en cada juego, aun cuando no viene hermético.

En la tarde de este domingo 23 de mayo, los New York Yankees se enfrentaron en otro emocionante partido, contra los Chicago White Sox, en busca de lograr la barrida en subserie de tres, que tuvo como sede el Yankee Stadium, de New York.

Los Yankees marcaron temprano dos anotaciones, cuando en el propio episodio de apertura, un encendido Gleyber Torres, pegó sencillo de línea al jardín central, que trajo a Luke Voit y Aaron Judge a la registradora.

Luego ampliaron en el quinto, por rola para doble play salida del bate de Gio Urshela, con bases llenas sin out, pero que sirvió para impulsar desde la antesala a DJ LeMahieu.

En el sexto arriba, nuestro Pito Abreu despachó un enorme cuadrangular por el jardín central con Yoan Moncada en primera base, para acercar a los White Sox, 3-2, pero en el cierre de ese propio inning, los Yankees marcaron otra y se volvieron a alejar, 4-2.

Otro cubano, el receptor Yasmani Grandal, fue responsable de la tercera carrera de los patipálidos, al conectar su sexto jonrón de la campaña, en la parte alta del séptimo episodio.  

Y como ocurre casi a diario, con el juego 4-3 y ventaja de una para los Yankees, hizo su aparición en el montículo el cerrador estrella de la tropa de Aaron Boone, el zurdo cubano Aroldis Chapman, quien sumaba su salida número 19 de la temporada y la duodécima oportunidad de salvamento.

Al primer hombre que enfrentó Chapman, por segunda salida consecutiva, fue al dominicano Yermín Mercedes, quien se fue dominado al primer lanzamiento, una recta a 98 millas, en línea al jardín izquierdo.

A continuación, le correspondía batear a Adam Eaton, pero el manager de los White Sox, Tony La Russa, decidió traer como bateador emergente a Andrew Vaughn. Y la estrategia del timonel de los patipálidos, le salió a las mil maravillas.

Vaughn dejó pasar una recta a 100 millas lanzada por Chapman, la cual cayó en zona mala, pero luego le hizo swing a otra recta de 99, conectándole un largo cuadrangular por el centro del terreno al cubano, que empató el juego a cuatro carreras.

Aquí el batazo de Vaughn, el cual salió de su bate a una velocidad de 109.8 mph y fue a parar a una distancia de 432 pies.

De esta forma, Chapman perdió la oportunidad de salvamento en el juego y la primera de la temporada, luego de sumar 11 materializadas de manera consecutiva.

Además, el cubano permitió su primera carrera limpia de la campaña y su primer cuadrangular. Eso no ocurría, de hecho, desde el pasado 3 de septiembre de 2020, cuando J.D. Davis (New York Mets) le pegó jonrón en el cierre del noveno capítulo.

Tras el bambinazo, Chapman otorgó un pasaporte gratis a su compatriota, Yasmani Grandal, luego de trabajarlo con tres rectas a 98 y 99 millas y dos sliders a 84 y 85. Esto quizás lo desconcentró aún más, pues cometió incluso un wild pitch que movió al corredor sustituto, Danny Mendick, a la intermedia.

Sin embargo, el punto de giro para Chapman fue dominar a Leury García, con el juego empatado a cuatro carreras, un out y corredor en segunda base. Para ello, necesitó un total de ocho lanzamientos, en los cuales Aroldis apeló a todo su repertorio.

Una recta a 98 millas y una slider a 87, sirvieron para los dos primeros strikes a Leury, aunque luego llegaron dos bolas malas: sinker a 100 y slider a 87. Par de fouls consecutivos sobre recta a 100 millas y slider a 85 demostraron que el bateador no se iba a rendir y aunque recibió una tercera bola (slider a 85), falló finalmente en rodado a tercera base, sobre otra slider, pero a 84 millas.  

A partir de ese momento, comenzó a cambiar la historia para el “Misil Cubano” y todo color gris se fue tornando en claridad. Ni el propio Chapman se podía imaginar lo que vendría después.

El cierre de la entrada fue relativamente fácil para el cubano, pues ponchó a Nick Madrigal con solo tres lanzamientos, par de rectas a 99 y 100 millas y su ya acostumbrada sinker a 102 millas por hora, que hizo lucir muy mal al bateador.

La parte baja del noveno capítulo, fue la muestra perfecta de que todos los breaks están rompiendo a favor de Chapman en esta temporada. Sencillo de Clint Frazier, boleto a DJ LeMahieu tras ponche a Brett Gardner y jit por el cuadro interior de Tyler Wade, colocaron tes hombres en base con un out en la pizarra para los Yankees.

La escena quedó lista para que Aaron Judge consumiera su turno al bate, ante el relevista Liam Hendriks, quien vino a trabajar frente al espigado jardinero de los Yankees, pero sin suerte. Cuatro bolas malas fueron suficientes para traer desde tercera a Frazier, en carrera forzada, con la victoria para el equipo de New York, primer walk-off en la carrera de Judge.

Aquí les compartimos el video del momento en que Judge recibe el boleto y certifica la victoria de los New York Yankees 5-4 ante los Chicago White Sox:

También les traemos un resumen de ese noveno episodio ofensivo para los New York Yankees:

Y luego de toda esa alegría, ¿pueden adivinar quien se llevó la victoria? Pues el mismísimo ¡¡¡Aroldis Chapman!!!

A pesar de haber permitido el jonrón y no poder sumar su duodécimo juego salvado, Chapman se llevó su cuarto éxito de la contienda sin derrotas y su tercera. En 19 salidas, ha lanzado un total de 19 entradas completas y suma 11 salvados, además de 37 ponches, a razón de casi dos por inning.

Luego de permitir su primera carrera limpia de la temporada, su promedio de efectividad quedó en 0.47 y su WHIP ascendió a 0.74, con un average rival de .100 exactamente, aun cifras extraordinarias.

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