Por Kiara González
El 2020 ha sido un año fatal en todos los sentidos y no solo por el impacto directo de la pandemia. El béisbol cubano ha sufrido la pérdida de figuras estelares, con el deceso del reconocido historiador Ismael Sené como el punto de partida de otros destacados que también nos abandonaron.
El más reciente de los fallecimientos se produjo el pasado viernes en la capital cubana, cuando a los 92 años de edad se apagó la vida de uno de los mejores lanzadores que tuvo la Isla en los primeros años de la década del cincuenta.
Nelson Jorge Campver González era el expelotero cubano vivo más longevo y el último sobreviviente de aquella selección nacional que en 1951 abrió el sendero triunfal para nuestro béisbol en Juegos Panamericanos.
El diestro natural de Cabaiguán se convirtió en uno de los monticulistas más respetados del circuito amateur cubano desde los años finales de la década del cuarenta, afianzando sus resultados iniciado el siguiente decenio. Brilló en la Liga Nacional y la Liga de Pedro Betancourt, suficiente para ser incluido en el equipo Cuba que participó en los Juegos Panamericanos de Buenos Aires. Allí derrotó con clase al peligroso México para contribuir a la coronación de los cubanos, una de las pocas preseas áureas de la delegación de la mayor isla del Caribe.
Nelson fue firmado rápidamente como profesional, desempeñándose sobre todo en las Ligas Menores de Estados Unidos. Su mejoría indicaba un ascenso rápido a la Liga Profesional Cubana y en un futuro no tan lejano dentro de las Grandes Ligas, pero una lesión cuando se deslizó en segunda base frustró por completo su éxito como lanzador.
A su regreso a Cuba se dedicó por años al desarrollo del béisbol de menores, hasta que se acogió al retiro definitivo en su hogar del municipio Cerro, a escasas cuadras del estadio Latinoamericano.
Allí vivió sus últimos días, lleno de vitalidad y deseos de vivir a pesar de que tras la muerte de su esposa hace seis años había quedado con toda su familia fuera de Cuba. Ellos mantuvieron la atención desde Miami, conjuntamente con el respaldo que recibió de algunos vecinos y amigos fieles.
Aunque estuvo bien fuerte física y mentalmente hasta mediados de este año, poco después que el proyecto Béisbol de Siempre lo visitara para celebrar su onomástico número 92, un tumor en los pulmones se agudizó considerablemente hasta causarle la muerte el pasado 18 de diciembre.
Con su fallecimiento, ahora es el también exlanzador Ibrahim Brull el más añejo de todos los cubanos que han jugado béisbol a un nivel importante. El jaranero bayamés cumplió 92 este 2020 al igual que Nelson, pero unos meses después, el 21 de diciembre.
Salvo muy contadas excepciones, fue lamentable el hecho que la prensa cubana pasó por alto la noticia y lo mismo aconteció con los medios no oficiales. Aunque varios representantes de las autoridades del béisbol y el deporte en la Isla si se hicieron presente durante el funeral.
El colega Yasel Porto dedicó un homenaje especial a Nelson en el cual no solo se refirió con suma emoción a su vínculo personal con él, sino que en el video se reflejan algunos momentos especiales con el carismático exlanzador.
Aquí los dejamos con el material que fue estrenado este lunes en el canal de YouTube de swing completo: