Por Andy Lans
Versátil, defensivo, agresivo en su juego, constituyen algunos de los calificativos que podrían servir de carta de presentación al jardinero camagüeyano Dayron Varona Suárez. No obstante, el agramontino también ha sabido batear con solidez en varios momentos de su carrera.
Lo demostró con los Toros del Camagüey en la Serie Nacional 2008-09 (su segunda temporada) cuando exhibió línea ofensiva de 321/373/557 en 51 partidos. Para la campaña siguiente obtuvo la titularidad en el jardín central del elenco de la ciudad de los Tinajones (apareció en 88 de los 90 juegos).
Dayron Varona conectó para 329, pegó 10 cuadrangulares y 21 dobletes, anotó 55 carreras, impulsó 49, se coló entre los diez primeros robadores de base con 12 estafas y su porcentaje de embasado (OBP) ascendió a 396.
Dayron, durante tu debut en las Series Nacionales, incursionaste en todas las posiciones menos la primera base, campo corto y lanzador ¿Cuánto te ayudó esa versatilidad de tus inicios?
-Me esforcé mucho en esa primera serie para lograr estar en el equipo. Jugué casi todas las posiciones porque anhelaba salir al terreno al precio que fuese. Me ayudó a largo plazo. Aunque no era un utility estelar, al menos resolvía el problema.
¿A qué se debió el bajón que tuviste en la Serie 2011-12? (AVE: 279 y 13 errores)
-Obviamente, todos los años no podían transcurrir con la misma brillantez. Esa temporada tuve alguna que otra desavenencia con la dirección del equipo. Al mánager Ulacia le dio un infarto, y gracias a Felipe Sarduy pude jugar después de casi 15 días.
Sin embargo, en la edición 52 de nuestros clásicos domésticos, Dayron Varona encontró su mejor versión. Aparecieron los refuerzos en la pelota cubana, y el entonces director de Villa Clara, Ramón Moré, pidió a Varona para redondear los jardines.
Luego de su paso por Toros y Azucareros, Dayron ocupó la séptima posición entre los bateadores con promedio de 343, disparó seis jonrones, impulsó a 32 compañeros y pisó el home en 37 ocasiones.
En los playoff produjo para 231, con cinco anotadas y par de traídas al plato. No obstante, en las praderas izquierda y central, Varona disputó los 99 capítulos posibles sin cometer una sola pifia. Villa Clara levantó el título ante los Cocodrilos de Matanzas. Al término de la justa, Dayron Varona finalizó tanto en el Todos Estrellas defensivo como ofensivo.
¿Alguna anécdota en específico de aquella final Villa Clara-Matanzas?
-Bueno, dicen que antes de aquel famoso jonrón Ariel Pestano en el último encuentro, Víctor Mesa visitó al pitcher para decirle que el único que no le podía dar un batazo era Pestano. De todos modos a Ariel se le fue la mano ahí (sonríe).
También te coronaste con los Criollos de Caguas en la Serie del Caribe ¿Qué título disfrutaste más?
-Le concedo mucha importancia a cada título adquirido. El de Villa Clara, por ser el primero, nunca pensé que me pudiera pasar. Recuerdo que Moré mencionó mi nombre en la última ronda de refuerzos. De todos modos, ganar en Puerto Rico resultó grandioso.
La historia le reservó a Dayron Varona un lugar de privilegio en el béisbol cubano. El 22 de marzo de 2016, se convirtió en el primer pelotero que jugó en Cuba después de haber salido en busca del sueño de jugar en Grandes Ligas.
Los Tampa Bay Rays arribaron a La Habana para topar con la selección nacional antillana. Varona alineó como primer bate de los visitantes. Al momento en que lo sustituyeron por Steven Souza en el tercer capítulo, llevaba de 2-0.
Cuando viniste con el Tampa Bay ¿Con cuál pelotero cubano te dio más gusto reencontrarte?
-Con Jonder Martínez. Compartimos la habitación mientras reforzábamos a Villa Clara. En el plano personal, agradecí volver a ver a mi familia. Cuando salí a batear y todos me aplaudieron, sentí mucha emoción.
Entre los peloteros de los Rays ¿Cuáles te ayudaban más?
-El lanzador Chris Archer y el entrenador Kevin Cash, jaraneaban bastante en torno a mi persona. Evan Longoria buscaba un traductor para decirme cualquier cosa, siempre me tenía presente. Longoria me enseñó cómo lidiar en este gran sistema.
Dayron ¿Qué debería cambiar para que vuelvas a la Serie Nacional?
-No debería cambiar nada, simplemente sucede que en el país donde decidí rehacer mi vida, ahora tengo dos niños a los que debo atender.
¿Qué representaría para Dayron Varona quedar campeón con sus Toros de la Llanura?
-Representaría una hermosa experiencia. No negaría mi interés de hacerlo, pero como te dije en la pregunta anterior, de concretarlo sacrificaría a mi familia o la llevaría a una inestabilidad. Pero bueno, dejemos esa pregunta abierta al tiempo. En un futuro la responderé de forma más certera.