Por Antonio Palma Enseñat
Los cambios de aires siempre vienen bien cuando las cosas no van marchando de acuerdo a lo esperado, casi siempre esto rinde buenos frutos. Así le está sucediendo al lanzador cubano Johan Oviedo desde que llegó canjeado a los Pittsburg Pirates procedente de los Saint Louis Cardinals.
Quizás el hecho de jugar en una franquicia menos exitosa puede haberle quitado presión al habanero, pero lo cierto es que se nota más dominante y está teniendo los mejores rendimientos de su carrera en los finales de esta temporada, que pudieran ser el preludio de un 2023 superior.
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Así de inmenso lució Oviedo este sábado cuando se encaramó en el montículo del PNC Park ante Chicago Cubs, a los que maniató durante siete entradas permitiendo solo tres hits, en tanto ponchó a siete bateadores rivales y no regaló boletos; igualando lo mejor de su carrera en Las Mayores.
El joven derecho de 24 años solo utilizó 82 lanzamientos, 58 de ellos en zona buena mostrando control exquisito, algo que lo había golpeado en otras salidas anteriores. Se apoyó fundamentalmente en dos lanzamientos, la recta de cuatro costuras que le llegó hasta las 98 mph y un slider que se movió entre 86-88 mph y que casi siempre usó cuando tenía a los bateadores en dos strikes.
Mientras sus compañeros de equipo lo apoyaron a la ofensiva, sumado a excelente relevo de Zach Thompson para consumar la lechada a dos manos sobre los Cachorros con score de 6×0 y de paso romper una racha negativa de ocho derrotas consecutivas para los Bucaneros.
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Con esta actuación Johan Oviedo logró su cuarta victoria en la temporada, misma cantidad que en su carrera en el Big Show (4-10); en tanto logró bajar su PCL a un aceptable 3.13 y ya acumula 49 ponches. Son avisos de que en 2023 los Piratas van a tener que contar con este cubano para su rotación abridora, de momento se lo está ganando.
