Por: Robiel Vega
El público es ese elemento extra que tienen los equipos de béisbol para lograr resultados positivos. No es casualidad que casi todos logren sus mejores rendimientos jugando en casa. El aficionado es la razón y el motivo principal para salir a jugar cada día este deporte que amamos, pero a veces, demasiada emoción, puede jugar en contra.
Durante el partido efectuado en el Minute Maid Park, casa de los Astros de Houston, en la noche de éste viernes 20 de agosto y que enfrentó a los locales contra los Marineros de Seattle, ocurrió algo muy curioso a la altura del cuarto inning.
Yordan Álvarez, de excelente rendimiento en dicho encuentro, se enfrentó al primer relevista de los Marineros, el derecho Wyatt Mills. El tunero, en conteo de 3 bolas y un strike, castigó una recta a 93 millas lanzada completamente por el lado del brazo y la mandó de línea por todo el jardín izquierdo.
Todo parecía indicar que el designado de los Astros se anotaba su segundo cuadrangular del partido, pero entonces ocurrió lo impensado. Cuando la pelota parecía llevarse la cerca, un aficionado muy entusiasta y deseoso de hacerse con la pelota, metió los brazos dentro del terreno y realizó el fildeo de la noche.
A primera vista no se vio si la pelota daría contra el alto muro del estadio de Houston o si realmente se iba de jonrón y aunque la sola intervención del aficionado era suficiente para decretar doble por obstrucción de espectador, la jugada se revisó en el video.
En la cámara lenta se observa que la pelota daba en la parte superior del muro, pero queda la duda de si el aficionado no hubiera intervenido, la pelota se hubiera terminado marcando del terreno. La jugada terminó siendo tubey por obstrucción de fanático.
De igual manera, Yordan trajo otra para el plato pues con el doblete remolcó desde segunda a Michael Brantley con su cuarta del partido para poner la pizarra 8 carreras por 1 favorable a los Siderales.
Finalmente el choque terminó con paliza de 12 x3 y el toletero tunero se fue de 5-2 por segundo día consecutivo, pero esta vez con par de anotas, 4 empujadas y dos extrabases, doble y jonrón.
El tridente cubano estuvo intratable, pues el Yuli tuvo jornada de reencuentro con su forma y disparó 3 hits en 5 turnos, con 2 empujadas, una anotada y un jonrón. Mientras que Aledmys, héroe de la jornada anterior, volvió a irse de multihit, de 5-2. En total los nuestros se fueron de 15-7, con 6 empujadas y dos jonrones. Casi nada.
No los demoro más, le dejo con esta curiosa jugada y recuerden que pueden ver todos nuestros videos pinchando aquí.