Los dos aficionados de New York Yankees que le arrebataron la pelota al jardinero de Los Angeles Dodgers, Mookie Betts, durante la serie Mundial 2024, fueron sancionados indefinidamente.
Mediante una reciente publicación de New York Post Sports en la red social “X”, se pudo conocer que los dos fanáticos que impidieron el fideo del jardinero de Dodgers durante el cuarto juego de la Serie Mundial entre Los Angeles Dodgers y New York Yankees, fueron excluidos de todos los estadios de la Major League Baseball (MLB) por tiempo indefinido.
Yankees fans who mauled Mookie Betts at World Series banned from all MLB stadiums indefinitely https://t.co/jWYltEPlX3 pic.twitter.com/bXkxRwMc8k
— New York Post Sports (@nypostsports) January 10, 2025
Recordando aquel acontecimiento, durante la primera entrada, Mookie Betts saltó junto al muro en territorio de foul e inicialmente atrapó el elevado conectado por Gleyber Torres, pero el espectador en la primera fila, vestido con un jersey gris de visitante del conjunto local, New York Yankees, se aferró al guante del estelar jardinero derecho de Los Angeles Dodgers y con ambas manos le sacó la esférica.
Gleyber Torres fue declarado out inmediatamente por interferencia del aficionado. Aquella fue la segunda ocasión que el venezolano era afectado por interferencia de un fanático en un turno al bate en esa Serie Mundial. Previamente, con dos outs en el noveno inning del primer juego en el Dodger Stadium, el jugador de New York Yankees había bateado un elevado al jardín izquierdo y un aficionado se inclinó sobre la barda y atrapó la bola, por lo que se le otorgó un doble.
El fanático de New York Yankees y propietario de las entradas, no perderá sus derechos
Austin Capobianco y John P. Hansen, fueron expulsados de aquel encuentro y excluidos del Juego 5 en el Bronx, que resultó ser el último juego de la temporada. Ambos fanáticos de New York Yankees ocupaban los asientos de un abonado, que es propietario de las entradas desde 1990 y no estuvo presente y, por tanto, podrá conservarlas.
Se debe señalar que el abonado habría apoyado la decisión de prohibir a los dos aficionados de New York Yankees asistir a más partidos. En una carta de un funcionario de MLB obtenida por The Post, la liga escribió en parte a los fanáticos prohibidos: “Su conducta representó un riesgo grave para la salud y la seguridad del jugador y superó con creces la línea de comportamiento aceptable de los fanáticos. Según su conducta, Major League Baseball lo prohibirá indefinidamente en todos los estadios, oficinas y otras instalaciones de MLB”.
Este tipo de conducta se ha ido agravando cada año en MLB y ya es hora de tomar riendas en el asunto. Cualquier medida ejemplarizante es generalmente apoyada por la fanaticada que prefiere disfrutar del juego, más allá de que su equipo de preferencia salga airoso o derrotado. No solo la fanaticada de New York Yankees ha sido protagonista de hechos como estos, prácticamente se ha visto acciones similares en el resto de los estadios.
En su momento, la directiva de New York Yankees también se pronunció en contra de esas actitudes. Todo lo que se haga por la salud del juego, será bien recibido. Las emociones no deben interferir en el show. En el mejor de los casos, ambos aficionados podrán seguir los juegos de su equipo por radio o televisión y no como ya estaban acostumbrados a hacerlo.
