Por Yasel Porto
Poco antes de partir hacia La Habana parte del equipo de Swing Completo tuvo la posibilidad de intercambiar con la mayoría de los integrantes de la selección cubana de béisbol que quedó eliminada en el torneo preolímpico de las Américas, y uno de los que no podía faltar en ese diálogo era el capitán del plantel, Frederich Cepeda, la figura más experimentada entre los jugadores y con una gran historia a cuestas.
“Fue una experiencia nueva y de las más cortas que he tenido yo. Para mí fue un juego de pelota donde no produje y después de emergente, aunque no pude dar jonrón al menos pude traer una carrera que sirvió para acercar a Cuba”, dijo el estelar número 24 de la escuadra antillana.
A la pregunta de la experiencia personal que vivió, especialmente el turno al bate en el que fue sacado a batear de sustituto de Yadil Mujica tras el reclamo de cientos de fanáticos que vitoreaban su nombre, el capitán de la selección cubana dijo que era como si el equipo estuviera jugando en Cuba. “En la Florida hay muchos cubanos y latinos en general, y eso ayudó a que desde el primer partido se viviera tremenda emoción igual que ese segundo juego cuando las personas comenzaron a gritar mi nombre. Eso es algo muy bonito porque es la reafirmación de que hay mucha gente que te tiene bastante aprecio”.
Con respecto a las causas de una nueva derrota internacional, el jugador con experiencia de 20 años en el equipo cubano reconoció que se han mantenido los mismos problemas habituales en esencia. “Lo primero es que no pasó lo que todos esperábamos, primero nosotros y después la afición. No lograr ese objetivo es lo más importante, que nos obliga a trabajar en todos los fallos de siempre, incluyendo el hecho de que hay que prepararse más. Este fue un evento súper difícil donde van a quedar eliminados casi todos, no solamente Cuba. Nosotros tenemos una afición más exigente posiblemente la mayor de toda América Latina. Tenemos que tener la mente fría y tratar de mejorar para conseguir la victoria. Es verdad que hace mucho rato que no se gana y por eso hay que seguir trabajando”.
Volviendo al tema de la presión, Cepeda recalcó que no hubo ningún tipo de desconcentración por tema público y achacó que lo psicológico se debió a otros factores. “Yo pienso que la tensión principal fue por la ansiedad en el equipo de lograr el resultado. El Latinoamericano con 55 mil personas es más abrumador que lo que pasó aquí, pero lo que pasa fuera del terreno de juego propiamente a nosotros no nos preocupa. Hubo situaciones pero sabemos que es algo normal para lo que estábamos preparados además”.
A propósito del tema de las críticas de los fanáticos en el aspecto netamente deportivo el popular jugador espirituano dijo que como peloteros tienen que tener la suficiente capacidad para enfrentar todo tipo de críticas. “Cuando tú tienes personas que te critican o te apoyan sabes que eras una persona seguida, y lo que tienes que hacer es coger a las personas positivas y poder sumar a los que están en tu contra, aunque lógicamente que sabemos que muchas veces las cosas no salen”.
Frederich remarcó que no está pensando en el retiro aún con sus 41 años y el no haberse podido destacar en un evento que para un grupo de personas pudiera ser su despedida con el equipo Cuba. “Yo voy a seguir jugando y preparándome, y no considero que haya estado mal, pues yo me sentía bien desde la preparación. Las decisiones las toman las direcciones y yo hago la parte que me toca dentro y fuera de Cuba. Hasta que la salud me lo permita voy a seguir jugando y aportando, con la gente que me aplaudirá y los que estarán en contra mía”, concluyó el que no pocos catalogan el jardinero izquierdo más destacado que ha pasado por las Series Nacionales.
En el choque de apertura se fue en blanco, incluyendo un bateo para doble play en la segunda entrada frente a Aníbal Sánchez, y su momento más especial fue su fly de sacrificio como emergente en el juego contra Canadá que trajo la cuarta carrera de los cubanos.