Por Juan Páez
Yoán Moncada tuvo en 2020 un año bastante complicado. En pocas palabras, su desempeño ofensivo sufrió un retroceso notable con respecto a lo que logró en 2019. Además de contagiarse del COVID-19, nunca encontró el ritmo en la caja de bateadores. Ahora, cuando se alista para la temporada 2021 de las Grandes Ligas, tiene la seguridad de que todo será diferente.
«El año pasado fue muy difícil», dijo Yoyo a MLB.com. «No solo por el virus, sino porque nunca pude producir al nivel al que estoy acostumbrado. Tuvo mucho que ver con mi ritmo. Verdaderamente, me mantuve en una batalla durante todo el año y nunca me sentí cómodo. Esta vez me siento mejor y creo que podré mantenerlo durante todo el año. Esa es mi meta».
A lo largo de 52 compromisos en 2020, Moncada bateó para frecuencias de .225/.320/.385 en 231 apariciones al plato. Consiguió ocho dobletes, tres triples y seis jonrones, además de 24 impulsadas. El peor punto de su rendimiento es que cayó 72 veces por la vía del ponche.
Tales números contrastan en demasía con lo que registró en 2019, la que es la mejor temporada de su hoja de vida en Grandes Ligas. En aquel año, disputó 132 juegos y conectó 161 imparables, con 34 dobles, cinco triples y 25 estacazos de vuelta completa. Fabricó 79 rayitas y anotó en 83 ocasiones, con un OPS de .915. Esas estadísticas van en consonancia con lo que quiere Moncada para este año.
«Este año la diferencia es que mi cuerpo se siente bien. Me siento fuerte y he recuperado mi fuerza, mi energía. Estoy muy cerca de estar al 100 por ciento. Realmente, creo que esta va a ser una temporada muy buena para mí en todos los aspectos. Para eso estoy trabajando duro».
Parte de ese trabajo tiene que ver con las piernas. El cubano quiere volver a ser una amenaza en las bases y lo reafirmó en el juego del domingo de la Liga del Cactus entre los Medias Blancas de Chicago y los Cerveceros de Milwaukee: apenas en el primer episodio salió con éxito a la conquista de segunda base. Otro punto en el que quiere mejorar es en su frecuencia de ponches, que fue de 33.4 por ciento en 2018, disminuyó a 27.6 por ciento en 2019 y volvió a incrementarse a 31.2 por ciento el año pasado.
«Voy a tener la misma mentalidad que tuve en 2019. Tomaré bastantes pitcheos, pero al mismo tiempo seré agresivo con los pitcheos que me gusten», declaró el tercera base de los patiblancos. «Eso me ayudó a ser exitoso hace dos temporadas y también puede ayudarme este año. No estoy diciendo que pondré los mismos números, porque eso nadie lo sabe, pero estoy totalmente seguro que podré ser un bateador más productivo que el año anterior. Ese es mi objetivo».
Moncada entrará a su sexta campaña de por vida en las Mayores y a la quinta con los Medias Blancas. Entre otras metas, persigue los 500 imparables (392 en la actualidad) y 100 dobletes de por vida (83).