Según Jon Heyman, el cubano Yuli Gurriel todavía está en el radar de los Miami Marlins, así lo dejó saber en su cuenta de Twitter y hay varios factores que apuntan a que así será.
Yuli Gurriel es residente de la Florida y ha sido una tendencia para la organización del sur de ese estado en captar jugadores residentes allí, como los casos del también cubano Jorge Soler y el de Avigail García. También mostraron interés en firmar a Aroldis Chapman, también residente en Miami, pero finalmente éste aceptó un contrato con los Reales por 3.75 millones.
Otro aspecto importante es que los Marlins están buscando a toda costa mejorar su ofensiva, tal es así que sacrificaron a Pablo López, un relevista intermedio de muy buenas prestaciones en las dos últimas campañas, al mejor prospecto del infield José Salas y al prospecto Byron Chourio, para que llegara al equipo el actual campeón de bateo Luis Arráez.
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Los Fish no necesitan estrictamente agregar un primera base ya que ya tienen a Garrett Cooper en esa posición, quien ha sido un bateador superior a la media en cada una de las últimas cuatro campañas, pero se lesiona con frecuencia y aún no ha llegado a los 120 juegos en ninguna temporada de su carrera.
Además, Gurriel es un jugador versátil que también puede ubicarse en la segunda y tercera base. De hecho, comenzó su carrera en la esquina caliente y esto podría convertirlo en un verdadero comodín en la alineación de los Marlins.
Gurriel ha sido inconsistente en sus últimos tres años, con un 2020 para el olvido, un 2021 donde fue líder de los bateadores de la Liga Americana y un 2022 donde tuvo una campaña regular por debajo del promedio, pero su actuación en la postemporada fue muy destacado, siendo una de las piezas claves para la consecución de la Serie Mundial para los Astros.
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Esta inconsistencia y su avanzada edad, le harán un fichaje relativamente barato para una organización que tiene una nómina que oscila en los 100 millones, una cifra modesta para los estándares de la MLB.
De concretarse este contrato, como muchos esperan, ocurriría algo histórico, nunca antes visto en la franquicia de la Florida: los Marlins tendrían en su alineación a los dos últimos campeones de bateo de la Liga Americana. Esto es algo que, incluso, se ha visto pocas veces en las Grandes Ligas y que sin dudas le daría un plus a la ya frecuente débil ofensiva de los Fish, una ofensiva que produjo un wRC+ de 88 el año pasado, ubicándolos en el puesto 25 de los 30 equipos de la liga.
Yuli sería el tercer gran fichaje ofensivo de la temporada baja, luego de Jean Segura y Luis Arráez, a lo que se sumará el regreso de Jorge Soler, quien se perdió gran parte de la temporada pasada por espasmos en su espalda.