Alejandro Varela
En medio de las expectativas por el inminente nuevo récord de cubanos en una temporada de Grandes Ligas, otra buena nueva acaba de llegar para el béisbol de la mayor isla del Caribe.
Los Cincinnati Reds acaban de llamar al paracortos habanero Jose Barrero para ser activado mañana en Miami, de acuerdo con el periodista Francys Romero. De concretarse su regreso al máximo nivel, el habanero de 24 años se convertiría en el jugador número 31 o 32 nacido en Cuba en ver acción durante la actual campaña de MLB.
La noticia llega justo después de las promociones de Yusnier Díaz, quien debutó este martes con Baltimore e igualó la plusmarca de 30 jugadores implantada en 1967 y alcanzada nuevamente en 2016 y 2019; y Miguel Vargas, previsto también para vestir un uniforme MLB por primera vez mañana con los Dodgers.
Por lo tanto, aunque la mítica barrera aún no se ha roto, es altamente probable que este miércoles sea superada con creces. La interrogante entonces sería quién lo hará, si Barrero o Vargas. En cuestión de horas lo sabremos.
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En el caso del hijo del otrora jardinero de los Industriales de La Habana Luis “El Fino” García, ya hizo su debut en la Gran Carpa hace par de cursos con los Reds, pero a inicios de este año sufrió una lesión que lo sacó en la primavera del roster del equipo y le impidió colarse en el Día Inaugural de la temporada 2022.
A finales de mayo, la organización de Cincinnati lo activó en Triple A con los Louisville Bats y en 55 juegos ha dejado una línea ofensiva de .209/.262/.377, con 9 estacazos de vuelta completa como principal mérito, el último de ellos esta misma noche, poco antes de conocerse la noticia de su llamado nuevamente a MLB.
Realmente, sus números resultan discretos y los 89 ponches en 220 turnos hablan de un parámetro a mejorar urgente, pero diversos reportes cercanos a los Reds apuntan que incorporar al shorstop de 24 años es un movimiento inteligente desde las oficinas, a partir de la llegada de nuevos prospectos en el infield del equipo que también buscan ganarse un puesto.
En sus dos temporadas previas al más alto nivel, Barrero solo jugó en 45 partidos (24 en 2020 y 21 en 2021) para una línea de .197/.242/.248. Con mucha más madurez y ya sano de las lesiones que lo golpearon en el pasado, ha llegado su oportunidad de probar que está hecho para la MLB.