La próxima estrella cubana se llama Luis Robert y podría subir a la MLB este 2019

Por Juan Páez El 2019 para Luis Robert ha sido lo más parecido a un periplo alrededor del sistema de ligas menores de los Medias Blancas de Chicago. El jardinero ha recorrido casi todas las sucursales de los patiblancos desde el año pasado, pero su recorrido por las filiales de la organización podría estar cerca […]

Por Juan Páez

El 2019 para Luis Robert ha sido lo más parecido a un periplo alrededor del sistema de ligas menores de los Medias Blancas de Chicago. El jardinero ha recorrido casi todas las sucursales de los patiblancos desde el año pasado, pero su recorrido por las filiales de la organización podría estar cerca de llegar al final, con un llamado a Grandes Ligas para convertirse en la siguiente promesa cubana que da el salto a la Gran Carpa.

Por cada nivel en el que jugó hasta ahora en la presente campaña, Robert se encargó de probar que tiene poco por demostrar en los niveles inferiores a las Mayores.

A menudo exhibe todas las cualidades de las que goza como bateador: promedio, poder, disciplina y una velocidad que muy pocas veces se ve en un slugger.

Según MLB.com, el capitalino (que está a punto de cumplir 22 años de edad) es el quinto mejor prospecto de las Grandes Ligas, el tercero entre jugadores de posición y el primero en los Medias Blancas. Es el único antillano que aparece en la lista de las mejores 10 promesas, pues Yordan Álvarez está en la undécima casilla.

A los números se remite

Robert arrancó la zafra 2019 en Clase A avanzada, con el Winston-Salem Dash. Allí, en tan solo 19 juegos, tuvo una línea de .453/.512/.920 y ligó 16 extrabases en 75 turnos legales con el madero. También remolcó 24 carreras y se robó ocho bases en 10 intentos. Esos números le valieron un rápido llamado a Doble A, con el Birmingham Barons.

En esa categoría disputó 56 compromisos, soltó 16 dobles, tres triples y ocho estacazos de vuelta completa, estadísticas acompañadas por una línea de .314/.362/.518. Remolcó 29 rayitas, anotó 43 y se estafó 21 almohadillas en 27 oportunidades.

Y justo cuando algunos pudieron pensar que el ascenso a Doble A empezó a pesarle, lo subieron a Triple A y siguió brillando. Con el Charlotte Knights, donde está actualmente, tiene 10 desafíos hasta la jornada del lunes y suma 14 hits, distribuidos entre seis sencillos, dos dobles, un triple y cinco cuadrangulares, incluyendo un Grand Slam en su debut. Suma 11 impulsadas y tres bases robadas, además de un OPS de 1.142.

¿Lo veremos arriba?

Con sus números y ya casi con 22 primaveras (3 de agosto), es probable (quizás 50-50) que Chicago decida darle una probada de las Grandes Ligas cuando los rosters se expandan, el 1 de septiembre. Robert parece estar listo para llevar su juego al más alto nivel: “Cuando sea que ellos me llamen, yo estaré listo”, dijo hace pocos días en una entrevista a MLB.com.

El asunto es que los Medias Blancas podrían hacer lo mismo que han hecho otras organizaciones (por ejemplo, los Cachorros de Chicago con Kris Bryant o los Azulejos de Toronto con Vladimir Guerrer Jr.) para sumar otro año de control sobre el jovencito y “retrasar”, en pocas palabras, la agencia libre. Si la organización toma ese camino, entonces Robert tendría que esperar, como mínimo, mediados del primer mes de la siguiente temporada para que su nombre aparezca en un lineup de la Gran Carpa.