Por Daniel de Malas / swingcompleto@gmail.com
La cancelación del Acuerdo MLB-Cuba de parte del gobierno de los Estados Unidos ha sido la noticia más contundente en materia deportiva para la isla, en lo que va de año. La prensa de Houston se acercó a los dos peloteros cubanos que juegan en los Astros, buscando sus consideraciones.
Yulieski Gurriel y Aledmys Díaz, parte de la armada de beisbolistas de la mayor de las Antillas, son, en ambos casos, los considerados desertores y solo así consiguieron llegar a la MLB.
El caso del Yuli fue notorio, al abandonar (junto a su hermano Lourdes Jr.) el Equipo Cuba en la Serie del Caribe del 2016 en República Dominicana.
Aledmys, por su parte, dejó el equipo nacional en el 2012 en Holanda.
Dejar atrás Cuba y tener que jugar en las Grandes Ligas, pasando trabajo, poniendo en peligro tu vida y sin regresar a tu tierra, es parte de la vida de ambos peloteros cubanos.
«Es increíble», dijo Aledmys al Houston Chronicle sobre la oportunidad de jugar en la MLB «Primero que todo, como ser humano, para tener la oportunidad de tener libertad, ir a donde quieras ir y pensar lo que quieras pensar, es un gran cambio en la vida. Al mismo tiempo, tienes la oportunidad de demostrarte (a ti mismo) a este nivel. Muchos jugadores cubanos tienen el talento, pero no tienen la oportunidad.
«Sería genial en el futuro», agregó, «si (más) los jugadores cubanos tuvieran la oportunidad de venir aquí y jugar a este nivel».
Bajo el acuerdo histórico que marcó la MLB con la Federación Cubana de Béisbol en diciembre, los deseos de Díaz se cumplieron, aparentemente.
El acuerdo obligó a la Federación Cubana de Béisbol a liberar a los jugadores contratados que deseaban firmar con los clubes de la MLB. Los jugadores tenían que tener al menos 25 años y tener al menos seis años de experiencia de juego. Las ligas profesionales en Corea, Japón y China tienen acuerdos similares con las Grandes Ligas de Béisbol.
La semana pasada, la administración del presidente Donald Trump canceló el acuerdo. Sostuvo que la federación de béisbol era parte del gobierno cubano.
«Definitivamente me sentí muy feliz al principio, especialmente sabiendo que debido a eso, habría más jugadores cubanos capaces de venir a los Estados Unidos», dijo Gurriel a través del intérprete de los Astros, Oz Ocampo.
Gurriel agregó que está «un poco triste» por el fracaso del acuerdo, «especialmente por los jugadores con los que he hablado que han escuchado las noticias y están decepcionados por ello».
Parte del acuerdo de la MLB exigía una tarifa por firmar con cualquier equipo de Grandes Ligas, que iría a la Federación Cubana de Béisbol.
La administración Trump rescindió una política del expresidente Barack Obama, que dictaminó que la liga de béisbol de Cuba era independiente de su gobierno.
«Los pagos a la Federación Cubana de Béisbol no están autorizados…porque un pago a la Federación Cubana de Béisbol es un pago al gobierno cubano», dictaminó una carta enviada a la MLB desde la Oficina de Control de Activos Extranjeros del Departamento del Tesoro.
«Los peloteros allá no reciben toda la información, por lo que es difícil para los cubanos saber qué está pasando», dijo Aledmys. «Así que siento que en este lado tenemos un poco más de información al respecto. Como dije, es una situación complicada».
El comisionado de la Grandes Ligas, Rob Manfred había dicho que estaban «tratando de poner fin al tráfico de jugadores de béisbol de Cuba, por parte de organizaciones criminales al crear una alternativa segura y legal para que esos jugadores firmen».