Por Boris Luis Cabrera
Un barco haciendo aguas con un capitán en crisis en medio de vientos huracanados, embistió esta tarde de jueves contra la nave capitalina dirigida por Rey Vicente Anglada, echando por la borda informes de especialistas que habían vaticinado un cielo bien azul y mareas calmadas en el estadio Nelson Fernández de San José de las Lajas.
No es temporada de Huracanes en la Serie Nacional de béisbol, sin embargo los anfitriones, arremetieron con fuerza contra los visitantes desde el mismo primer episodio, jugaron con un ímpetu insólito sobre el césped, y se llevaron en buena lid el partido seis anotaciones por cuatro.
Después del doblete remolcador de Lisbán Correa en la primera entrada que auguraba un clima perfecto para celebrar victorias, comenzaron a arreciar los vientos del este cuando otra conexión de dos bases, esta vez de Juan Carlos Hernández, traía a dos mayabequenses a casa, ventaja que no perderían jamás en el transcurso del choque.
Negros nubarrones coparon el cielo cuando dos episodios más tarde Dariel Olvia y Yasniel González le pegaban sendos imparables impulsores al diestro Vladimir Baños para ampliar diferencias y sembrar el desconcierto en el puesto de mando de los Leones capitalinos.
Justo en la mitad del desafío, otra vez el ángel de Yhosvani Peñalver aplacó tormentas sacando la esférica del terreno con un compañero a bordo para estrechar la pizarra pero no era tarde de épicas remontadas habaneras ni de cuentos de hadas.
En el octavo, Baños se quedó en la banca y entre Denis Quesada y Yandi Molina bolearon a tres rivales para congestionar las almohadillas, momento justo para que Michael González, quien ha tenido una temporada incierta con los grados de capitán del conjunto, tomara con fuerza el timón de la vergüenza y disparara un cañonazo de dos bases por la línea de tercera base remolcando dos carreras que provocaron el naufragio de las huestes azules.
A última hora, en medio ya de un clima adverso de vientos huracanados y malas vibras haciendo eco por los graderíos, otra vez Correa dejó caer una pelota en lo corto de la pradera central para empujar una, insuficiente para alcanzar a sus adversarios en el marcador.
La tropa del “Rey” dejó a 10 corredores fríos en las almohadillas durante todo el juego, bateó dos veces para doble matanza y falló 15 veces con compañeros en circulación, factores que sin dudas fueron claves en el desenlace final.
Con esta derrota, los Industriales presentan ahora un balance parejo de 15-15 y nuevamente salen de la zona de comodín ocupando los puestos nueve y diez, abrazados con los Vegueros de Pinar del Rio.