Uno de los mejores defensores de la segunda base del béisbol cubano, seguro en el pivot, con grandes desplazamientos y potente brazo. Pero no solo defensivamente fue una estrella sino que además promedió por encima de 300 de average. Esto lo convierte en uno de los intermedistas más destacados en la historia del béisbol cubano, me refiero a Juan Padilla Alfonso. Sus grandes fildeos fueron cotidianos, disfrutados por los parciales azules en casi los últimos veinte años del Siglo XX.

Junto a Germán Mesa, Padilla integró la más espectacular combinación de doble play de la pelota cubana. De allí sus calificativos de “El Mago” Mesa y “La Maravilla” Padilla.

Han existido muy buenas combinaciones alrededor de segunda, podemos mencionar a Alfonso Urquiola-Giraldo González por Pinar del Río, Antonio Pacheco-Evenecer Godínez y Luis Miguel Navas-Héctor Olivera por Santiago de Cuba, Sergio Quesada-Luis Ulacia por Camagüey, y Juan Carlos Moreno-Alexander Rámos por la Isla de la Juventud. Pero, no sé si estarán de acuerdo conmigo… lo que hacían Germán y Padilla alrededor de segunda no creo que lo hayan hecho otros, por lo que en mi opinión han sido los mejores defensivamente.

Con Juan Padilla conversamos via internet para nuestros seguidores en Swing Completo.

-¿Cómo te inicias en el béisbol?

Desde muy pequeño comienzo a jugar béisbol en los placeres casi siempre con niños mayores que yo. Ya cuando cumplí 9 años en Santiago de las Vegas crearon un área especial, yo me presenté hice las pruebas, nos median velocidad, fortaleza del brazo, fildeo y otras cosas. Nos presentamos cerca de 200 muchachos y entre los 50 seleccionados estaba yo. Mi primer entrenador fue Rolando Núñez Chavez conocido por Chavito, tengo que mencionarlo porque tuvo mucho que ver en mi vida deportiva y personal. Así comencé organizadamente en el béisbol.

-¿Siempre como segunda base?

No, yo jugaba en el jardín izquierdo pero como era bajito de estatura, Chavito mi entranador me dijo, “ve para segunda base que allí lo vas a hacer mejor”. Ademas jugaba en el campo corto, tercera, era receptor y hasta lancé. En esas categorías se juegan todas las bases. Quiero decirte que en la categoría 9 y 10 años hasta la juvenil me considero que fui un buen picher. Lanzaba en Provinciales y tiraba muchas curvas. Pero siempre vi que la base con la que más afinidad tenia era la segunda.

-¿Pienso que no eras un jugador con un gran físico, eso impidió que te captaran en categorías inferiores?

Sí, yo nunca tuve un gran físico, hasta los 15 años fui bajito, delgado, siempre quise estar en la EIDE y nunca fui captado. Recuerdo que cuando iban a hacer las pruebas para la EIDE a mí no me la hacían, siempre escogían a los muchachos de más estatura con somatotipos mejor que el mío. Yo preguntaba: ¿Por qué a mí no me hacen las pruebas? Y Chavito me decía que en el área había que dejar también jugadores con calidad y yo respondía que siempre me tocaba quedarme. Por eso nunca estuve en la EIDE.

-¿Cómo llegas a la Serie Nacional?

Llego en 1983, yo había estado en dos nacionales juveniles con el equipo Habana, donde era tercero y hasta cuarto bate. Allí tuve buenos resultados y esto me ayudó a integrar Metropolitanos a la Serie Nacional.

Comenzaste en los Metros, el segundo equipo de la Capital, ¿Cuándo pasas a Industriales?

Jugué dos series con Metros 83-84 y 84-85. Ya en el 85 integré el equipo a la Serie Selectiva con José Miguel Pineda como director. Ya en 1986, Pedro Chávez pasa de Metros a Industriales como director y se llevó varios jugadores entre ellos yo. Ese año Industriales tuvo muy buenos resultados y pienso que fue mi año de consagración en el béisbol.

-¿ Cuándo integras el equipo Cuba por primera vez, pienso que en esa época coincidias con Antonio Pacheco en segunda? ¿Tenías una buena amistad con él?

Ese mismo año 1986, yo con 19 años integré por primera vez el equipo Cuba a los Juegos Centroamericanos de Santiago de los Caballeros en República Dominicana y después al Campeonato Mundial en Amsterdam, Holanda.

Cuando llegué al equipo Cuba, Antonio Pacheco era el titular y allí comenzó una buena amistad. Yo siempre digo que Pacheco además de haber sido uno de los mejores peloteros de nuestro béisbol es una excelente persona y un buen amigo.

-¿Momentos felices en el béisbol?

Tuve muchos momentos felices:

Cuando integré Metropolitanos a la Serie Nacional; cuando pasé para Industriales; cuando hice por primera vez el equipo nacional y mi primera Olimpíada en 1992 en Barcelona. Pero entre todos estos momentos felices quedó marcado en mi la Serie Nacional que ganamos en 1986, con el famoso jonrón de Marquetty, yo solamente tenía 19 años, terminé como primer bate en ese equipo y pude aportar mi granito de arena a esa gran victoria de los azules. Esos días no podré olvidarlos jamás.

-Hablame de la combinación con Germán, ¿como se ponían de acuerdo, ensayaban jugadas?. Tu opinión de él.

Esta relación con Germán surgió años atrás. Recuerdo que yo estaba en la ESPA y Germán en la EIDE ya que él es dos años menor que yo. Vino un equipo Universitario de Estados Unidos y se integró una selección cubana y coincidimos German como torpedero y yo como segunda base. Allí surgió la combinación Germán-Padilla.

Luego nos encontramos de nuevo en Industriales en el año 1988.

Independientemente de como interactuábamos en el terreno alrededor de segunda base, siempre hemos tenido muy buena amistad y pienso que eso nos ayudó a que la combinación short-segunda saliera adelante.

En los entrenamientos practicábamos muchas jugadas que después las llevábamos al juego cuando se creaban las condiciones, unas veces jugando con las gradas pero otras en momentos difíciles que muchas veces salvaron encuentros.

-Creo que hubieras podido jugar más. Tenías todas las posibilidades de haber jugado tu tercera Olimpíada en Sydney pero ese lamentable accidente te privó de uno de tus ojos. Hubieras podido llegar a los 2000 hits, (terminaste con 1914) quizás a las mil anotadas (961) e impulsadas (913). ¿No crees?

Si yo pienso que hubiera podido jugar 3 o 4 años más sin problemas, yo me lesionaba poco. Se produjo este lamentable accidente en un momento en el que yo estaba en forma, me sentía muy bien.

Una de mis metas era llegar a los 2000 hits y me quedé en 1914, yo pienso que en una serie o en dos, estando mal hubiera llegado, al igual que a las 1000 anotadas y las 1000 impulsadas.

En cuanto a la Olimpiada de Sydney, fui invitado, estuve en Barcelona 92, Atlanta 96 y en Sydney hubiera podido ser regular, ya había sido titular en los Panamericanos de Winnipeg 99.

-¿Qué significó el béisbol para ti?

El béisbol para mi pienso que ha sido mi vida. Tengo 54 años ahora y no puedo estar sin él. Desde los 5 años he estado vinculado a este deporte. Ha significado todo para mí. Si volviera a nacer volvería a jugar béisbol porque sin él no sé que hubiera sido de mi vida.

-¿Hay varias estrellas en Series Nacionales que luego de años, no le han hecho el retiro oficial, ¿tú eres uno de ellos?

Si, desgraciadamente hay muchos jugadores que no le han hecho el retiro oficial, yo estoy entre ellos. Pienso que para un atleta que lo ha dado todo por el béisbol, el retiro es algo que deseamos y creo que merecemos. Es el adiós del pueblo. Recuerdo cuando retiraron a Pedro Medina y a Agustin Marquetty, se le salieron las lágrimas. Debe ser un momento difícil pero bonito. Uno aunque lo ve, como no lo ha experimentado se pregunta ¿Qué sentirá un atleta en ese momento? No puedo decirte lo que se siente porque nunca me han hecho el retiro. Hubiera sido un momento muy bonito con el reconocimiento del público en el Latino para mí y mis compañeros.

-Siempre hablamos de los protagonistas Padilla, pero, tienes una gran compañera, Natacha, ¿qué ha significado en tu vida?

Para salir adelante en la vida, nuestras esposas juegan un rol muy importante. Mi esposa Nati hubiera querido conocerla mucho antes, fui muy afortunado porque llegó en el momento en que más la necesitaba y gracias a ella he podido seguir adelante en muchas cosas, ya llevamos 15 años y estamos enamorados como el primer día.

Mi agradecimiento a uno de los grandes peloteros cubanos y del cual me enorgullezco además que me considere un amigo.

Estadística en Series Nacionales de Juan Padilla:

Ofensiva

Series Nacionales : 17