Por Juan Páez
Todo indica que esta temporada muerta estará caliente e interesantísima para los peloteros cubanos, dada la buena cantidad de agentes libres que habrá disponibles en el mercado. Aroldis Chapman podría ser un ingrediente más a esa mezcla de peloteros que incluye a figuras como Yasiel Puig, Yasmani Grandal y José Abreu si el cerrador rescinde su contrato con los Yankees de Nueva York.
Debido a que no habrá muchos apagafuegos sin trabajo, Aroldis Chapman se convertiría inmediatamente en uno de los peces gordos. El cerrojo zurdo sería un blanco especialmente para equipos con posibilidades de competir en el corto plazo.
En Swing Completo analizamos los posibles destinos que tendría el histórico siniestro si rompe su acuerdo con los neoyorquinos:
1) Medias Rojas de Boston: Hay un nuevo gerente general en Boston (Chaim Bloom) con la misión de ganar, fortalecer las bases y rebajar la nómina, todo al mismo tiempo. Los patirrojos tienen en camino la imperiosa necesidad de extenderle el contrato a Mookie Betts, la cara de su alineación, pero no se pueden dar el lujo de no tener un cerrador establecido, algo que le trajo problemas en 2019.
Los Medias Rojas registraron la cuarta peor efectividad colectiva en el noveno inning, con 4.60, un mal que podrían aliviar instantáneamente con la llegada de Aroldis. También, sería un golpe de orgullo quitarles a sus archirrivales una pieza clave y reforzarse con ella.
2) Filis de Filadelfia: Los cuáqueros quieren darle a Joe Girardi, su recién contratado mánager, las piezas necesarias para ganarlo todo pronto. Y Chapman puede ser la solución a uno de sus males en todo el 2019: el puesto de apagafuegos. Héctor Neris terminó como el taponero del club, pero no se afianzó como alguien de confianza.
El bullpen de los Filis finalizó con la segunda mayor cantidad de jonrones recibidos en la Liga Nacional (102), el tercer peor average de los oponentes (.258) y el quinto peor WHIP (1.39). Lo mejor de todo es que la gerencia de la organización parece aún no concluir sus gastos, así que no sería una sorpresa escuchar: “Aló, con Aroldis Chapman, por favor. Es de parte de los Filis”.
3) Indios de Cleveland: Los Indios no quieren desaprovechar una muy buena generación de peloteros comandada por Francisco Lindor, José Ramírez, Mike Clevinger y compañía. Llegar a la Serie Mundial y perderla ha sido el mayor “logro” para un equipo que sigue sin poder armar el rompecabezas de la mano del dirigente Terry Francona.
Este año se quedaron fuera de la postemporada y seguramente querrán volver a ese terreno en 2020. Los aborígenes ya saben lo que es tener un bullpen dominante, pero les falta un cerrador efectivo, un puesto que no llenó del todo Brad Hand. El zurdo dejó efectividad de 3.30 y un peligroso WHIP de 1.24. Quizás Cleveland quiera reforzar la parte baja del cuerpo de relevistas y devolver a Hand al rol de preparador, en el que ya estuvo en 2018.
4) Angelinos de Los Ángeles y de Anaheim: Los californianos contrataron a Joe Maddon como su nuevo estratega, un hombre que solo sabe y quiere ganar siempre. Este equipo no quiere desaprovechar al mejor jugador de esta generación, Mike Trout, ni los últimos años en la carrera del legendario Albert Pujols.
Parece que su principal objetivo en la temporada muerta será firmar a Gerrit Cole, pero el club tiene más vacíos que llenar. Y el puesto de taponero es uno. Hansel Robles no deslució esta campaña como cerrador, pero fue su primera zafra cumpliendo ese papel y al club no le vendría mal añadir a un hombre más seguro y confiable para desempeñarse en su lugar. Los Angelinos nunca han sido amarretes con su chequera y no lo serán esta vez, con Maddon con un simple propósito: alzar el trofeo de campeón.
El único problema es que Chapman, al menos cuando firmó su contrato con los Yankees, pidió no ser cambiado a un equipo de California para no alejarse de su familia. Tendría que cambiar de idea o recibir una oferta irresistible para dar el “sí”.
5) Dodgers de Los Ángeles: Caso parecido al de los Angelinos por estar en California, pero dinero hay de sobra en Los Ángeles. Pareciera el destino menos probable de los cinco mencionados, pero todo es posible con una franquicia frustrada y sedienta de un título.
El cerrador Kenley Jansen fue uno de los puntos flacos de los Dodgers en 2019. Antes de esta campaña era imposible pensar que el derecho corriera el riesgo de ser removido de su puesto de apagafuegos, pero su efectividad quedó en 3.71 y tuvo ocho blown saves a lo largo de la campaña, más que los acumulados entre 2017 y 2018 (cinco). No se sorprendan si Aroldis Chapman cambia el azul oscuro de Nueva York por el azul claro de Los Ángeles para la próxima zafra.