Por Boris Luis Cabrera
Desde que la sepa del coronavirus fue declarada pandemia esta semana por la Organización Mundial de la Salud (OMS), se han cancelado múltiples eventos deportivos alrededor del mundo donde la aglomeración de personas constituye un gran riesgo para su propagación.
Este viernes el número de casos reportados a nivel mundial sobrepasaba los 140 mil afectados en 125 países y se había tenido que lamentar la muerte de más de 5 mil personas.
Mientras la realización de los Juegos Olímpicos de Tokio en el próximo verano pende de un hilo aunque sus organizadores se mantienen firmes, las principales ligas profesionales de muchos deportes han cerrado sus puertas hasta nuevo aviso.
Las noticias de aplazamientos y suspensiones se van amontonando unas sobre otras en las agencias informativas alrededor del mundo, mientras terrenos, pistas, colchones y tabloncillos, se van quedando vacíos.
En Estados Unidos, el país de América donde más rápidamente se ha multiplicado el virus, los casos de contagio ascienden a más de 1500 y ya han fallecido por esa causa casi medio centenar de personas, lo que ha llevado a la prohibición en varios estados de eventos deportivos como el béisbol (MLB) o el basquetbol (NBA), por solo mencionar las más importantes.
Cuba se mantiene con una férrea vigilancia en sus fronteras y no ha podido evitar la entrada de algunos contagiados, reportándose hasta el momento de escribir estas líneas solo cuatro casos, tres de ellos turistas italianos.
Sin embargo, la rápida propagación hace pensar, a pesar de todas las medidas tomadas por nuestro país al respecto, que este número podría ir creciendo con el paso de los días, como ha sucedido en otras latitudes.
El béisbol es la pasión más grande de los cubanos y su Serie Nacional el espectáculo por excelencia en el país. Su poder de convocatoria a los estadios (en aumento en los últimos años) comienza a inquietar a muchos en medio de este contexto que nos amenaza, al acercarse su día inaugural el próximo 11 de abril con partidos pactados en ocho provincias diferentes.
¿Qué debemos hacer al respecto? ¿Aplazamos su comienzo dada las circunstancias o corremos el riesgo? ¿Confiamos en su control dentro de nuestro territorio, prevenimos desde ahora o esperamos a ver cómo se desarrollan los acontecimientos? ¿Jugamos a puertas cerradas?
Algunas teorías indican que en poco tiempo la tendencia será a la disminución de los contagios, sin embargo otras más alarmistas hablan de un camino largo para su total erradicación.
SwingCompleto buscó la opinión de algunos periodistas deportivos de prestigio de diferentes medios que dejamos a disposición de los lectores.
Yasel Porto (Coordinador general del proyecto Béisbol de Siempre)
“Yo estoy de acuerdo con postergar todo, dentro y fuera de Cuba, MLB, Serie Nacional, lo que sea, mientras no haya una cura real para esta enfermedad o no haya bajado el nivel de contagio completamente. Cero riesgos, el deporte no es más importante que la vida, aunque sea una parte fundamental en la vida de muchos de nosotros. Pero es preferible postergar pasiones que morir”
Norland Rosendo (Periódico Juventud Rebelde)
“Aunque aún
falta casi un mes para el inicio pactado, la situación indica que ninguna
propuesta debe descartarse, incluida la de aplazar la fecha inaugural de la
serie 60. Si ya iba a ser una temporada marcada por ajustes estructurales, el
impacto del covid-19 puede imponer más cambios.
Lo que más deseo es que el 11 de abril no haya pacientes contagiados en Cuba,
pero es poco probable que estemos en condiciones normales para entonces, así
que el reajuste de la apertura del torneo es muy probable, para preservar a los
atletas y evitar aglomeraciones en las gradas.
Un cambio de ese tipo podría, incluso, impactar en el calendario y en vez de 75
juegos de la primera fase dejarla en menos, con carácter excepcional.
Pero cualquier decisión debe ir previéndose y anunciarse oportunamente, porque
las preselecciones están entrenándose y deben adquirir el estado de forma de
los jugadores dentro de pocas semanas, un cambio en la preparación también
tiene un impacto notable en ese sentido.
Creo que es oportuno definir una fecha para decidir la suerte de la próxima
temporada”
Yasiel Cancio (Prensa Latina)
“Pienso que sería prudente la postergación de la Serie Nacional. Si bien Cuba todavía tiene pocos casos detectados, la expansión a escala global es demasiado alarmante como para correr riesgos innecesarios. Los dirigentes, y es mi criterio, deben pensar que la vida de seres humanos están en riesgo, no deben exponerlas de ninguna manera por una simple competición deportiva… recordemos que Cuba es un país con una población demasiado envejecida, y el virus, según dicen los científicos, ataca con mayor severidad a las personas ancianas”.
Joel Garcia (Trabajadores)
“Creo que hay que esperar la evolución en Cuba porque debe haber ahora, en los próximos días, un repunte quizás de los casos, hasta que comience a disminuir tal y como se comporta en los demás países. Por tanto, decretar la posposición del evento desde ya no creo que sea prudente.
En unos 20 días, tal y como aseguran la mayoría de los especialistas del mundo, la tendencia será a la disminución del contagio.
En resumen, creo que debía esperarse la evolución del país y en caso que se decrete su posposición, pues solo lo haría por unas semanas, e incluso pudiera ajustar el calendario a la cantidad de juegos de la pasada serie y dejar la nueva estructura para la 61 serie.
Pero reitero, solo si el tema se complica en extremo. Sino, la mantuviera el 11 de abril, porque para esa fecha los niveles de contagio deben haber disminuido y todo debe estar más controlado”
Aynel Martínez (Cubalite)
“Pienso que la Serie Nacional sí debería posponerse, como mismo están siendo aplazados otros certámenes deportivos internacionales. Después de que se conociera que hay coronavirus en Cuba, lo más sensato, me parece, sería tomar esa medida con el objetivo de evitar aglomeraciones de personas.
La salud de atletas, árbitros, directivos, periodistas y aficionados debe ser lo primordial en este caso
Es cierto que, de tomarse tal medida, habrá que hacer varios cambios en la preparación de los distintos equipos, pero la salud de las personas es siempre lo más importante”
Modesto Agüero (Comentarista)
“Pienso que sí hay que posponerla hasta que pase todo. En el Mundo entero se han suspendido los principales eventos incluido el inicio de Las Grandes Ligas”
Gregorio Oquendo (Radio Rebelde)
“La temporada sesenta de la pelota cubana que debe comenzar el 11 de abril si se viera afectada no debe jugarse a puertas cerradas. A mi juicio debería aplazarse como ha ocurrido en otros deportes como el futbol, tenis, ciclismo, en fin, que no deberíamos correr el riesgo del contagio de atletas, árbitros y demás personal que trabaje en la serie y esperar la situación final de la enfermedad”
Manuel Alejandro Pérez Capote (Televisión cubana)
“Para mí debe posponerse, la salud es lo más importante”
Pablo Enrique Díaz (Periódico Granma)
“Para el comienzo de la Serie Nacional aún faltan algunas semanas, y tal vez, para la fecha de inicio la situación esté un tanto más controlada, pero bajo ningún concepto se debe exponer a los atletas y al público en general a un riesgo epidemiológico. Si grandes eventos en el mundo están cancelando sus temporadas, nosotros debemos analizar nuestra situación en ese momento y aplazar nuestro mayor espectáculo deportivo el tiempo que sea necesario, ya que este tema es bastante delicado. Lo primero es la salud y el bienestar de los seres humanos”
René Javier Domínguez (Cubasí)
“Pienso que se trata de una pandemia con implicaciones globales y como tal se deben tomar las precauciones necesarias. Ya quedó aplazado por la WBSC el preolímpico de Arizona y las Grandes Ligas de EE. UU están hablando de trasladar los partidos a los Estados donde no haya infectados. También la NPB planea hacer ajustes drásticos a su calendario. En nuestro caso específico de la Serie Nacional se debe estar muy atento al desarrollo de la epidemia en el país. El calendario habla de arrancar en abril, jugando básicamente de día, y según las características del virus, éste desaparece a temperaturas superiores a los 26 o 27 grados. Así que el factor climático tropical pudiera favorecernos, aunque de cualquier manera la última palabra para dar comienzo a la temporada estará en manos de las autoridades sanitarias cubanas porque no hay nada más importante que la salud de los seres humanos y de nuestros peloteros”
Jhonah Díaz (Prensa Latina)
“Los grandes eventos deportivos a
nivel mundial han sido dinamitados. Eso debe sugerir algo.
Todos esos torneos suspendidos generarán grandes pérdidas económicas por
conceptos de publicidad, taquilla, televisión, venta en los estadios… y aun así
fueron cancelados o postergados. La ecuación es sencilla: la vida humana vale
más que todo. En este (lamentable y angustioso) caso, la seguridad de atletas,
entrenadores y seguidores debe estar por delante que cualquier “ambición”
deportiva.
Añada que si el deporte es espectáculo, ese show va dedicado a los seguidores,
y ¿de qué valdría jugar a puerta cerrada?
Apunto esto, porque una solución facilista podría ser empezar sin acceso al público, cosa que en mi opinión, valdría poco. Perder el dinamismo de la afición suena patético”
Félix Anazco Ramos (Periódico Adelante, Camagüey)
“Creo que si sigue expandiéndose debe posponerse el día de apertura. La SNB es el más genuino y extenso de los eventos populares en Cuba y debemos evitar la congregación de tantas personas. Al menos en Camagüey se jugó a grada llena toda la temporada anterior y eso es peligroso en estos casos, máxime cuando los seguidores más fieles pertenecen al grupo etéreo más vulnerable”
Dubler Vázquez (Periódico 26 de julio, Las Tunas)
“Seguramente
la experiencia de nuestros especialistas y el propio sistema de salud cubano,
con eficiencia probada en casos similares, permitan mitigar un poco la rapidez
con la que se propaga.
Sin embargo, estamos hablando de una enfermedad que en solo cuatro meses se ha
convertido en pandemia y que ya afecta a más de 120 países. Por eso creo que lo
más prudente sería aplazar el inicio de la Serie Nacional, que es el mayor
espectáculo del país, el que más afición mueve, con el consiguiente riesgo para
las personas.
Debemos aprender de lo que ha sucedido en muchos otros países. Casi la
totalidad de las ligas profesionales, las federaciones nacionales y las
organizaciones continentales y mundiales han actuado de manera rápida para
tratar de evitar la propagación del virus; aunque como ya hemos visto no en
todos los casos se han conseguido los mismos resultados y ya se lamenta el
contagio de no pocos deportistas.
Eso hay que evitarlo a toda costa en nuestro país, hay que cuidar la salud de
los atletas, de sus entrenadores, del personal de apoyo de los estadios y las
instalaciones deportivas, pero sobre todo de la afición, que es en definitiva
la esencia del espectáculo.
Esa debería ser la premisa de la que partamos para aplazar el inicio de la
Serie 60, teniendo en cuenta incluso que ese tiempo de descanso programado
entre una fase y la otra permitiría recuperar en algún momento del año el tiempo
que se deba esperar ahora”
Michel Contreras (CiberCuba)
Obviamente, un mes no será tiempo suficiente para tener garantías de que el estadio no se convertirá en propagador de la epidemia. So, se impone dilatar la arrancada del torneo (total, los cambios de calendario son el pan diario en la historia reciente de la pelota insular), y aguardar por el momento indicado para dar la voz de Play Ball! Paró la NBA, paró la Champions, La Liga se detuvo, el Spring Training de la MLB fue interrumpido… Entonces, qué nos lo impide a nosotros?