Por Swing Completo / contacto@swingcompleto.com
Llegamos al tercero de los candidatos que se han manejado internamente para ocupar la presidencia de la Federación Cubana de Béisbol: el exlanzador Yovani Aragón Rodríguez, quien fungió como Director Nacional de la disciplina y ha estado por años como vicepresidente de la FCB.
Como hemos aclarado antes con Germán Mesa y Pedro Medina, este análisis se basa en el consenso de opiniones tanto a nivel popular como en el plano interno, aportando lógicamente el criterio de parte del equipo de Swing Completo.
También es importante tener en cuenta que este cargo parte de una solicitud del Comité Olímpico Cubano y el INDER a las máximas instancias gubernamentales del país, que luego ratifican o no estas propuestas en función de determinados factores manejados por esos funcionarios que perfectamente pudiera incluir al mismísimo Miguel Díaz Canel-Bermúdez. Después de ese paso y como dijimos desde el escrito sobre Germán, se hace la votación de los candidatos en el seno de la Comisión Nacional y la Federación entre todos los que forman parte de la cúpula directiva.
Pasemos entonces a radiografiar al “hombre orquesta”:
Yovani Aragón: Fue un lanzador de muy buenos resultados desde mediados de la década del noventa que le abrió las puertas de la selección nacional principal en algunas ocasiones, como 1998, 2000, 2002 y 2003. Se ubica entre los mejores serpentineros de Sancti Spíritus en Series Nacionales. Pese a haber tenido muy buenas actuaciones con su capacidad para ponchar y ejercer muy buen dominio, junto a alguna que otra labor internacional relevante, muchos se mofan de él por el jonrón de un bateador ruso en el Mundial de 2003. Después de su retiro dirigió a los Gallos, y su unión sentimental con la hija del funcionario Luis Cartón le fue abriendo puertas en las oficinas del estadio Latinoamericano donde llegó a ser nombrado Director Nacional de Béisbol por tres años, así como Vicepresidente de la FCB, cargo que ha ocupado hasta hoy.
A favor como Presidente: Su experiencia en cargos de dirección es lo mejor que tiene a su favor, algo que le favorece por conocer a muchos que se mantendrán alrededor de él, y conoce cómo funcionan todos los mecanismos, además de haber establecido ciertos vínculos internacionales que pudieran ayudarlo a la hora de conseguir convenios para contratos individuales y opciones para topes y bases de entrenamiento. Algunas veces se muestra con buena disposición para liderar ciertas iniciativas.
En contra como Presidente: Muchísimo en realidad. No es popular entre un porciento notable de los que estarían como subordinados, y tampoco lo es entre jugadores, entrenadores, periodistas y aficionados. Su gestión como Comisionado fue negativa en un gran número de aspectos a criterio de la mayoría. Es demasiado complaciente con los jefes aún cuando se trata de algo injusto o absurdo. En realidad, muchas veces muestra un alto grado de comprometimiento y en otras su capacidad no le da para darse cuenta de los problemas o soluciones, o para defender el criterio más apegado a la realidad con sus superiores. Además de que no tiene metodología para asimilar por lo general las críticas, incluyendo las directas. No posee la inteligencia suficiente para asumir negociaciones con entidades extranjeras y mucho menos la MLB, aparte de su falta de conocimiento de cómo se mueve todo el mercado liguero en las cuestiones fundamentales.
El peso de la balanza: Posiblemente sea el candidato con más peso de lo negativo en comparación con sus aptitudes. Lo señalado a su favor incluso es bastante relativo, y de todos modos termina cediendo ante la gran cantidad de desventajas que tendría el que sea el hombre del béisbol cubano para el mundo.
¿Qué dice él?: Siempre va a estar de acuerdo a partir de sus ambiciones personales y profesionales. Nunca ha dicho que no a todos los cargos que le han propuesto y ascender más allá de la vicepresidencia de la FCB sigue siendo una aspiración para él.
Aragón Presidente: Hay quienes dicen que puede ser una etapa incluso peor que la anterior, pues el nivel de compromiso con los de “arriba” sería el mismo de siempre, con una empatía igualmente limitada con muchos de sus compañeros de trabajo, además de una imagen dañada ante la opinión pública y muchos jugadores, entrenadores y periodistas. A eso se sumaría un menor nivel de relaciones internacionales, un aspecto de consideración, y también una organización más deficiente que lo sucedido anteriormente. Sería un presidente con menos capacidad organizativa, de análisis y de tantas cosas más, y también menos inteligencia, modales, presencia y profesionalidad en comparación con Higinio, y muchísimo menos si se tira con otros nombres que se barajan para el cargo. Claro que podría haber propuestas más infortunadas si elaboramos una lista bien masiva según el criterio de todo el mundo, pero en la que se maneja internamente no solo Swing Completo, sino los propios miembros actuales de la FCB y la Dirección Nacional del Béisbol lo sitúan como la peor opción posible por estas razones aquí esgrimidas, y muchas más.
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