En un choque que requirió de la lotería de penales, el Real Madrid doblegó al Atlético de Madrid y se clasificó a los cuartos de final de la presente Champions League.
Pocos duelos existen en el mundo con el aura de competitividad que revisten los derbis madrileños y este miércoles la puja empezó de modo prematuro cuando Connor Gallagher marcó a los 27 segundos de partido luego del fallo en el despeje de Raúl Asencio.
Por cierto, según MisterChip, la diana del británico devino la más tempranera del Atlético Madrid en la historia de la UEFA Champions League, superando el tanto de Koke contra el Mónaco (a los 89 segundos) en noviembre de 2018.
Así, el dueño del Estadio Metropolitano (con Reinildo como principal novedad en el once titular) empataba momentáneamente el score global de un duelo para el que Real Madrid había apostado a sorprender con la presencia del veterano Luka Modric.
A partir de ese momento la visita trató de acosar cada pelota a pura intensidad, pero los colchoneros (una y otra vez) repelieron las embestidas con solvencia, luchando a toda costa los balones divididos y recostados a los espléndidos servicios de Marcos Llorente en la marca de Vinicius.
En el resumen de la mitad inicial, el Real Madrid dominó la posesión pero le costó generar jugadas de peligro para la cabaña de Jan Oblak, a diferencia de un Atlético Madrid que le puso toda la esperanza al contragolpes y las asociaciones de Antoine Griezmann y Julián Álvarez, incisivo a tiempo completo.
Esa tónica fue igual de dominante en el complementario, donde al minuto 54 Llorente estuvo a punto de anotar tras una vertiginosa conducción de Giuliano Simeone, derivada del irrisorio resbalón de Ferland Mendy.
Vinicius falló penal del Real Madrid
Sin embargo, el que más cerca estuvo de irse delante fue el Real Madrid, una vez que Clement Lenglet cometió una falta flagrante sobre Kylian Mbappé que el referee no dudó en sancionar como penal.
Era el minuto 70 de partido y daba la impresión de que los merengues tomarían una ventaja con pinta de decisiva. Pero Vinicius cobró horriblemente y la pizarra siguió igual mientras Diego Simeone se esforzaba por redoblar el aliento de la grada.
Al rato Brahim Díaz oxigenó el ataque del Real Madrid y en el Atlético Madrid entraron los habituales (Alexander Sorloth y Ángel Correa), aunque nada provocó cambios en el marcador. El 1×0 de la vuelta se combinaba con el 2×1 de la ida para dejar equilibrado el dual meet. Habría prórroga.
Los primeros 15 minutos de tiempo extra no sirvieron para romper el abrazo en el score, si bien hubo maniobras destacadas para ambos, especialmente una que Sorloth no alcanzó a enganchar después de un pase de Pablo Barrios.
Ya en el tramo definitivo, el cansancio hizo acto de presencia en la mayoría de elementos sobre el pasto, y pese a que las acciones fueron de ida y vuelta, no había claridad ni condición física para que el choque terminara antes de los penales.
Ya en esa instancia, Mbappé, Bellingham, Valverde y Rudiger acertaron, Lucas Vázquez falló, pero del otro bando erraron Julián (que le pegó con los dos pies) y Llorente, contra el travesaño, en tanto se salieron con la suya Sorloth y Correa.
Tras este resultado, el cuadro de los cuartos de final ha quedado como sigue: Barcelona, que eliminó al Benfica, chocará con el Borussia Dortmund, que le remontó al Lille; y por ese mismo lado del organigrama Bayern Munich (netamente superior al Bayer Leverkusen) se las verá con Inter de Milán, que dejó en la cuneta al Feyenoord.
Mientras, por el otro camino PSG (sorpresivo castigador del Liverpool) irá versus un Aston Villa que gestionó sin problemas su eliminatoria con el Brujas; y finalmente el Real Madrid se cruzará con el poderoso Arsenal.