Por Juan Páez
Para nadie es un secreto que el béisbol, más allá de ser un deporte que emociona a multitudes y causa grandes emociones, es una galaxia infinita de estadísticas y récords. Hay números buenos y malos, curiosidades, registros irrompibles, disputas por conseguir marcas, entre otros alicientes que brinda el sabroso mundo de los guarismos. Hoy les traemos un trío de cubanos en Grandes Ligas con categoría de leyendas y tres marcas increíbles.
En investigaciones de SwingCompleto, conseguimos tres récords bastante curiosos para traer al recuerdo o al conocimiento de ustedes. A continuación, la lista:
1) La constancia de Tony Pérez: Por algo, Tony Pérez fue inmortal. En su larga trayectoria en Grandes Ligas, “Tany” alcanzó logros innumerables. Por decir unos cuantos, fue siete veces al Juego de Estrellas, ganó dos Series Mundiales, remolcó más de mil 500 carreras y conectó más de 500 dobles. Pero hay un registro que lo tiene en un grupo exclusivo de las Mayores. El antiguo infielder, quien perteneció a la inolvidable Gran Maquinaria Roja, es uno de apenas 35 peloteros que han participado en 23 temporadas en la historia de la Gran Carpa.
Por el big show han pasado alrededor de 20 mil jugadores, por eso solo un minúsculo porcentaje representa a esos 35 cuyas constancia y calidad les permitieron estar en el mejor béisbol del mundo por 23 torneos. Tal lista incluye a leyendas como Nolan Ryan, Pete Rose, Roger Clemens, Phil Niekro y Omar Vizquel.
Con la actualidad de los megacontratos y la reciente hostilidad para figuras de 35 años o más en el mercado, es probable que nadie más se agregue a ese escalafón o que cada vez sea menos común ver a un veterano de 23 años en Grandes Ligas.
2) Qué mala suerte la de Palmeiro: Rafael Palmeiro es uno de los pocos peloteros con una carrera de tres mil indiscutibles y 500 jonrones.
Fletó más de mil 800 anotaciones y terminó con casi 600 biangulares.
Seguro cualquier jovencito o cualquier jugador experimentado con pocos buenos momentos en las Mayores envidia las estadísticas de “Raffy”, todas menos una: los dos mil 831 que disputó sin aparecer en Serie Mundial, el récord absoluto en la historia de la Gran Carpa.
El formidable extoletero fue tres veces a postemporada, pero se quedó en el camino en par de ocasiones en la Serie de Campeonato con los Orioles de Baltimore (1996, 1997) y no superó la Serie Divisional con los Rangers de Texas (1999).
Los cuatro que le siguen en esa lista también son leyendas del bateo: Ken Griffey Jr. (2671), Ichiro Suzuki (2653), Andre Dawson (2627) y Ernie Banks (2528).
3) “Minnie” nunca fue a la fiesta: Quizás un récord más doloroso que el de Palmeiro es el que ostenta Orestes Miñoso. “Minnie” nunca jugó en postemporada pese a totalizar mil 835 encuentros en 17 años de trayectoria.
Está en el puesto 26 de la historia en peloteros con las cadenas más largas de desafíos disputados sin tener siquiera una aparición en los playoffs.
Es entendible. Quizás, en esta época, parece increíble, pero en los años del capitalino como jugador no había llaves, ni tampoco la postemporada era tan extensa: los ganadores de las dos divisiones se enfrentaban en la Serie Mundial y se definía el campeón.
Hoy, en la actualidad, clasifican 10 clubes a la pelota de octubre.
El primero en ese grupo es Banks, con sus dos mil 528 duelos a lo largo de 19 campañas en la Gran Carpa.