Por Enrique Rey
La situación actual que se vive y que tiene paralizada la vida normal de todos dentro y fuera de Cuba ha obligado a replantear buena parte de la programación de la TV Cubana donde se incluye como es lógico su canal deportivo Tele Rebelde.
Por días se ha visto la repetición de documentales, programas y transmisiones deportivas, y en tal sentido como para mantener la línea y tradición el fútbol ha tenido el mayor protagonismo. Día tras día, o más bien, hora tras hora el más universal de los deportes ha mantenido su presencia perenne con la retransmisión de juegos de todo tipo de eventos y momentos.
Sin embargo, el que para muchos sigue siendo el deporte nacional, el béisbol, vuelve a verse afectado por la excesiva diferencia mediática en comparación con el balompié, y tal vez ahora más, al no estarse jugando la Serie Nacional ni ningún evento o liga (a excepción de la MLB que no se pone desde 2017), y estar casi sin temas atractivos en determinados programas especializados, entre ellos todavía seguido “Bola Viva”.
Según una publicación en Facebook de uno de los comentaristas deportivos del canal Tele Rebelde, Reynier Batista, se está “trabajando” para poner juegos históricos de béisbol, tanto de Clásicos Mundiales como de otras competencias nacionales e internacionales de trascendencia, y de esa manera llenar los espacios vacíos en la programación y satisfacer la demanda de miles de personas que más nunca pudieron ver esos partidos.
Algunos de esos juegos se encuentran subidos a YouTube, aunque casi ninguno de ellos está con la mejor calidad, por grabarse de la TV Cubana cuando todavía no había llegado a manos de la gente la famosa “cajita” con la señal HD. Pero nos imaginamos que muchos de esos encuentros deben estar en los archivos del canal, al menos sería lo más lógico.
No estamos hablando ni siquiera de los juegos memorables de los años 60, 70 u 80, quizá ni los que fueron parte de la etapa del “período especial” donde no existía la digitalización y el material posiblemente no alcanzara para guardar todo.
No sabemos a ciencia cierta si el término utilizado por Batista, uno de los más activos especialistas de béisbol del momento, tiene que ver a una búsqueda de muchos de esos juegos en esos archivos de la institución o los personales de quienes se han dedicado a guardar esas memorias por una u otra vía, o si en la misma se trata de que la calidad de imagen sea superior a lo que se puede apreciar en YouTube.
También ignoramos si el término tiene que ver a que ya aparecieron los juegos en buena o mediana calidad pero requiere de un proceso de edición especial por la presencia de jugadores que de ser héroes deportivos se convirtieron posteriormente en nombres prohibidos en la TV cubana por tomar la decisión de emigrar.
Del primer Clásico Mundial, el único que se recuerda con agrado por el magnífico resultado (quizas el mejor de la pelota cubana), muchos de los participantes y protagonistas no están actualmente en el país (Yadel Martí, Ariel Borrero, Eduardo Paret, Yuniesky Maya, Alexei Ramírez y sobre todo Yuli Gurriel).
Y si avanzamos más en el tiempo la situación será aún más complicada por la llegada de hombres como Yoennis Céspedes, José Dariel Abreu o Aroldis Chapman.
Durante mucho tiempo los jugadores cubanos de Grandes Ligas fueron ignorados completamente en los medios oficiales de la Isla, especialmente la TV Cubana, hasta que se tomó la decisión a que los periodistas hablaran de ellos sin resaltar demasiado sus logros.
Todos, a excepción de Yuli Gurriel, el que ya dijimos jugó un rol determinante en muchos de los juegos del Clásico de 2006, y que aparece en la mayoría de los juegos importantes de la primera década de este siglo. Década que a su vez fue la última etapa victoriosa de nuestro béisbol y de la que debe haber la mayor cantidad de juegos guardados por cercanía en el tiempo y por la existencia ya en ese momento de la digitalización.
Desde la suspensión del programa “Béisbol de Siempre” a fines de 2019 el único espacio beisbolero ligado con la historia en la TV Cubana es “Mi Béisbol”, pero su esencia son entrevistas a figuras relacionadas con la pelota, y apenas tiene 30 minutos de duración. Al margen de esto, se han hecho documentales sobre temas individuales y colectivos pero el número es muy insuficiente aún.
Esperemos entonces a que termine el proceso en el que está trabajando el canal según la explicación en Facebook y confiemos una vez más que por fin reviviremos grandes momentos sin pretender una imagen y sonido a la altura de los responsables de esas alegrías, a los que queremos volver a ver sin excepción de ninguno de ellos para que así renazca nuevamente esa pasión aunque sea a través de recuerdos.
Al fin y al cabo, en nuestra pelota cubana, con o sin la situación actual, de la historia es de lo mejor que podemos vivir.