Por Juan Páez
Aunque a Yasmany Tomás no le pagan para que juegue en las menores, el slugger pasó casi todo la temporada en la Triple A de los Diamondbacks de Arizona y fue uno de los peloteros más productivos con el madero. De hecho, y quizás con un toque irónico por parte de la historia, el “Tanque” tuvo su mejor campaña de por vida en las sucursales. Sus números incluso le valieron un cortísimo y agridulce regreso a las Grandes Ligas.
El toletero, uno de los mejores pagados actualmente en el sistema de las menores, participó en 102 desafíos con el Reno Aces. Dio 122 hits, 24 dobles, tres triples y 29 estacazos de vuelta completa. Impulsó 82 carreras y anotó 63 veces. Su promedio al bate quedó en .301, mientras que su OPS fue de .931. Nadie en su club, a excepción de Kevin Cron (38), tuvo más cuadrangulares que él.
El exindustrialista, en otros méritos, ganó el Homerun Derby de jonrones de este 2019 en la Triple A.
Tomás parece que no tiene nada que probar en una categoría inferior a la Gran Carpa. Ya bateó lo suficiente en las menores como para volver a las Mayores.
Aunque los Diamondbacks de Arizona han dado a entender que no hay cabida para el isleño en el big show especialmente por sus carencias defensivas, todo indica que Yasmany no tendrá una mejoría notable con el guante.
¿Cuál será su destino?
Por cómo se ha manejado la situación, pareciera que si el capitalino volverá a las Grandes Ligas para quedarse un buen rato, no será con su actual organización.
Este año sus números lo llevaron de vuelta al equipo grande, pero cuando se pensaba que podrían dejarlo arriba por lo que restaba de campaña regular, lo bajaron con apenas cuatro juegos disputados. Su balance fue de seis turnos legales en blanco, con tres ponches.
Ciertamente, no deslució. Pero no hace mucho, en 2016, Tomás fue un hombre de 62 extrabases en las Mayores.
Una oportunidad que incluyera mayor tiempo no le habría caído mal al slugger, menos a unos desérticos que prácticamente no tenían chance de asistir a la postemporada.
Su contrato
Es un hecho que el “Tanque” ejercerá la opción del jugador que hay en su contrato para 2020, por 17 millones de dólares. Después de eso, se convertirá en agente libre. Parece complicado que Arizona pueda cambiarlo, por lo que salvo un despido, es probable que sí termine su acuerdo con los “D-Backs”.
Si así ocurre todo, seguramente Tomás buscará un trabajo en la Liga Americana para 2021. En ese circuito podrá convertirse en un bateador designado a tiempo completo. Su destino parece ser ese o, en definitiva, salir de las Mayores y tomar el mismo camino de Leonys Martín, con rumbo a Japón.
No hay que descartar que los desérticos le den al veterano de 28 años (29 el 14 de noviembre) una oportunidad en los entrenamientos primaverales para ganarse un puesto en el equipo grande, pero a este punto parece improbable dado el historial.
Todo pudo ser muy distinto para Tomás. Al menos así lo esperaba el club cuando le dio el contrato por seis campañas y 68.5 millones de dólares, catalogado como uno de los peores en la historia de la organización.
Pero los pactos tienen un poco de predicción. Y esta no salió como todos querían.
El tiempo dictará el camino de Yasmany, quien tiene la edad a su favor para tomar un segundo aire en su carrera.