Hace algún tiempo la afición cubana no conocía del paradero de Yosvani Peraza, el gordo, como cariñosamente se le llama en Cuba. Luego de su exitoso paso por las Series Nacionales con los conjuntos de Pinar del Río, y sus incursiones en el team Cuba, se radicó en Italia, a mediados de la decada del 2010.
De visita en su tierra natal, Pinar del Río, un equipo de SwingCompleto fue a su encuentro y el otrora número 46 de los vegueros accedió a dialogar con gentileza y compartió impresiones, en exclusiva, para sus lectores. (ver video).
«Ahora me encuentro de vacaciones junto a mi familia y he estado entrenando con el equipo B de Pinar del Río para mantenerme en forma física de cara al inicio de la temporada italiana», comentó el máscara.
«Mi equipo este año no tomará parte en ningún nivel del béisbol bambino, al ser sancionado por problemas en su gerencia; yo jugaré con Fiorentina en calidad de préstamo por un año y mantengo el trabajo que realizo en Castenaso como entrenador de niños hasta edad juvenil», sentenció el slugger de San Juan y Martínez.
Lo cierto es que el fornido toletero se encuentra desde el año 2016 desempeñandose en las principales ligas del país europeo, alternando entre la Seria A1 y la A2 con el club Autovia Castenaso, teniendo un desempeño destacado, principalmente, en el segundo nivel, donde en el período comprendido entre (2016-2018) fue un bateador concistente, poniendo números de respeto dentro del circuito. “El primer año me costó un poco de trabajo adaptarme, porque estaba un poco fuera de ritmo, pero luego me recuperé” expresó Peraza Marín.
En la Isla, luego de un paso exitoso por las categorías inferiores, donde generalmente ocupó turnos de responsabilidad en la alineación, se desempeñó en 18 Series Nacionales siempre con novenas de la más occidental de las provincias cubanas, en las cuales despachó 249 macanazos, propulsó 883 carreras, y acumuló un slugging de 508 con average ofensivo de 298.
Fue en su tiempo el bateador cubano que más fuerte le pegaba a la bola y poseía una velocidad en el swing fuera de lo común. Los lanzadores lo respetaban tanto, que en 2008 implantó el récord de bases por bolas intencionales para una serie con 37. En este renglón se ubica en el sexto puesto de por vida, con 212 pasaportes indicados por la dirección del equipo contrario.
Al preguntarle si le gustaría volver a jugar con su provincia natal en la Serie Nacional, Peraza no vaciló en contestar: «Siempre he dicho con orgullo que soy cubano y eso nunca cambiará, si me lo permiten las autoridades del béisbol cubano, volvería a vestir la franela verde de mi terruño, solo necesito planificar bien mi tiempo, con respecto a las responsabilidades que tengo en Italia y con gusto jugaría aquí nuevamente».
Gracias a SwingCompleto por permitirme, después de cuatro años sin dar entrevista, expresarle a la afición lo que estoy haciendo en la actualidad, que no es más que, tratar de seguir poniendo en alto el nombre de la pelota cubana» terminó Yosvani Peraza.
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